Embajador Prado analizará con Canciller crisis de Paraguay
Julio Prado, embajador del Ecuador en Paraguay, quien retornó por orden del presidente Rafael Correa, en rechazo al golpe de Estado contra Fernando Lugo (ocurrido el 22 de junio pasado), dice que el país no se verá afectado en el intercambio comercial porque manejaba rubros ínfimos.
Prado, quien llegó a Quito la semana pasada, prefiere no referirse a la supuesta injerencia que habría intentado junto con Venezuela en la crisis paraguaya. Aclara que solo podrá hablar de este y otros temas tras reunirse, primero con el canciller Ricardo Patiño y después, con el Mandatario.
La nueva ministra de Defensa paraguaya, María Liz García, acusó al canciller de Venezuela, Nicolás Maduro, y a Prado de “arengar” a altos mandos militares paraguayos, en una supuesta reunión con ellos el 22 de junio, para que mantuvieran su lealtad a Lugo.
García entregó a la prensa y a la Fiscalía de su país varias grabaciones del circuito cerrado del Palacio de Gobierno que, según ella, prueban sus acusaciones contra Maduro, Prado y otros. Pese a que el diplomático insiste en que primero debe reunirse con Patiño y Correa, contestó algunas preguntas.
¿Cuándo llegó al país procedente de Paraguay?
Entre el viernes y madrugada del sábado (de la semana pasada).
¿Tiene fecha su regreso?
No.
¿Pero usted vino a Ecuador ya definitivamente o a consultas?
Eso depende del presidente (Rafael Correa) y del canciller (Ricardo Patiño).
¿Qué responde a la acusación de que usted habría participado de reuniones con militares paraguayos para que ellos no reconozcan a Franco?
No puedo decir nada hasta no hablar con mis dos jefes: el presidente de la República, Rafael Correa, y el canciller, Ricardo Patiño.
¿Cuándo se reunirá con el Mandatario y con el canciller?
La agenda del Presidente es muy movida y solo él me puede llamar.
¿Cuál es entonces el motivo de su presencia hoy (miércoles) en la Cancillería?
Estoy aquí haciendo mis cosas personales, viendo algunos datos y cosas de la Embajada allá (en Paraguay) y a visitar a mis amigos.
Hasta tanto, ¿quién quedó en la Embajada en Paraguay?
Allá hay una persona que se llama Pablo Martínez, agente consular encargado de funciones consulares.
Usted vivió de cerca la crisis política paraguaya, ¿cuál es su opinión al respecto?
No puedo dar nada, prometo decirlo luego de que hable con el Presidente.
¿Cómo queda la relación entre Ecuador y Paraguay, porque el canciller Patiño dijo que el Gobierno está pensando en declarar persona no grata a Franco y a congresistas que apoyaron la destitución de Lugo?
No tengo idea, no sé.
En la parte comercial, ¿qué se verá afectado entre Ecuador y Paraguay con el retiro del embajador y lo anunciado por el presidente Correa de no reconocer el gobierno de Federico Franco?
No había mucha actividad comercial (entre los dos países). Teníamos un nivel comercial de apenas 3 millones de dólares en total.
El comercio era poco porque la relación era más política y de cooperación, en otros planos como por ejemplo aprendizaje y manejo de hidroeléctricas, de temas de camales, mientras que nosotros estábamos dándole asesoría en manejo de reestructuración estatal y manejo informático para mejorar el nivel de las funciones públicas. De allí, nada más.
Si se venía una sanción más económica que política contra Paraguay, tal vez allí se le pasaba factura porque ellos dependen, por ejemplo, de la parte petrolera de los países del Mercosur
Claro, pero esa decisión no llegó a tomarse y todavía se sigue estudiando y, de ser del caso, esa decisión tendrán que asumir los presidentes (de los países que integran el Mercosur).