El canciller de Perú, Rafael Roncagliolo, afirmó que América del Sur vive actualmente “su hora”, en medio de la crisis financiera internacional, que ha encontrado unidos a los países del subcontinente. 

Roncagliolo inauguró ayer la Reunión Ordinaria del Consejo de Ministras y Ministros de Relaciones Exteriores de la Unión Suramericana de Naciones (Unasur). “La coyuntura de crisis en el mundo nos permite hablar, dos siglos después, de ‘la hora’ de América del Sur. La crisis nos encuentra unidos y con una visión clara, determinada sobre nuestro camino y nuestro destino común”, señaló Roncagliolo.   

El ministro peruano resaltó que se están construyendo “ejes de integración y desarrollo” en la región, que busca “cooperar para intercambiar conocimientos, experiencias y tecnologías”.

Los ministros de Relaciones Exteriores de los 12 países del bloque se encuentran en Lima para preparar la cumbre presidencial que se desarrollará hoy. 

Entre los temas que abordarán los mandatarios está la situación de Paraguay, país que fue suspendido del organismo al considerar como golpe de Estado la destitución del presidente Fernando Lugo, ocurrida hace tres meses.

Los gobernantes tendrán que decidir si continúan la suspensión o aumentan las sanciones, lo cual, en los actuales momentos, parece poco viable.

Unasur envió una misión a Asunción para analizar in situ la situación, pero el gobierno de Federico Franco la rechazó. Por eso no queda claro si la suspensión de Paraguay será levantada luego de las elecciones del próximo año. Los cancilleres elaborarán un documento que será entregado a los mandatarios. 

Otro de los temas a tratar es la defensa regional. Los viceministros del ramo de los doce países también se reunieron para debatir. Los objetivos son transparentar el gasto militar de la región y declararla como una zona de paz. De igual manera se quiere hacer frente a enemigos comunes, específicamente al narcotráfico.

Para Roncagliolo, una de las principales fortalezas de Suramérica reside en su carácter “pacífico y democrático”, por lo que consideró fundamental constituir una “auténtica zona de paz” y pidió “no mitificar nuestras diferencias”. “Es consustancial reafirmar la naturaleza pacífica de nuestras democracias, lo que nos permite reconocernos como naciones civilizadas integrantes de una zona de paz”, afirmó.

El peruano también manifestó que ser suramericanos “implica libre tránsito, apertura migratoria, derechos comunes y obligaciones que nos vinculan”. El presidente Rafael Correa viajará hoy a Lima.