Édgar Samaniego, rector de la Universidad Central del Ecuador (UCE), afirmó públicamente que en la reunión desarrollada el pasado 20 de marzo con las autoridades del Consejo de Educación Superior (CES) recibió como respuesta a su inquietud la noticia de que se hará un estudio de alternativas, las cuales podrían generar una reforma al Reglamento de Carrera y Escalafón Docente.

“El representante de la Senescyt (...) incluso dijo que estudiarán nuestras propuestas y que si era necesario modificar el reglamento lo modificarían. La universidad a la que represento me impide decir mentiras y mi contextura ética y moral me prohíben ir con falsedades”, aseguró Samaniego.    

Esto en base a la renuncia de 318 profesores por cumplir el límite de edad y los  900 que podrían jubilarse hasta el 2014. La primera causa incluye a los profesores que cumplieron 70 años; la segunda, a la renuncia voluntaria de los docentes para beneficiarse de la jubilación complementaria, cuyo plazo concluiría en diciembre del otro año.

“De acuerdo con el Reglamento de Carrera y Escalafón Docente, expedido por el CES, los profesores que deseen jubilarse el próximo año tienen que inscribirse y eso es lo que están haciendo”, explicó Samaniego. Como tercera causa se refirió a la renuncia voluntaria de profesores principales, los cuales -según afirmó- se encuentran amenazados de perder su categoría por no tener el grado de Phd.

“Tanto la Ley Orgánica de Educación Superior (LOES) como el Reglamento de Escalafón establecen que si hasta el año 2017 los profesores principales de nuestra universidad no tienen el grado de Phd, mantendrán su remuneración, pero descenderán al nivel de agregados”.

Otro motivo de renuncia radica en que los profesores agregados  perdieron la posibilidad de ser ascendidos a profesores principales, a partir de la vigencia del Escalafón. “El Escalafón despiadadamente destruye la carrera universitaria porque cuando se llega al nivel de docentes agregados ya no se puede ascender a principales sino que salen a concurso público”, señaló.

Por su parte Teresa Ayabaca, decana de la Facultad de Ingeniería, Ciencias Físicas y Matemática, explicó que el problema es cubrir las cátedras que, al momento, están suspendidas por falta de docentes que no cumplen con los requisitos del Reglamento de Escalafón. “Permitan llenar las cátedras con profesionales que, si bien es cierto, no tienen el título de cuarto nivel, tienen experiencia. La experiencia también vale. De esta manera la gente se prepararía y los estudiantes serían educados hasta que lleguen los profesionales con PhD”, indicó.

Ayabaca manifestó la preocupación de sus estudiantes del octavo semestre de Ingeniería Civil por la falta de docentes en la cátedra de Pavimentos. “Dos profesores que tenían 70 años se fueron. Entonces los estudiantes están cogiendo otras materias de noveno semestre. Pero ¿quién nos cubre la materia de octavo que están arrastrando?”. Y según la autoridad, existe el mismo problema con la asignatura de Diseño de Presas.  

Sobre la autonomía de la UCE, Samaniego afirmó que “la universidad no es un apéndice de la Senescyt” y negó que  se opongan a la excelencia educativa, refiriéndose al término que usó René Ramírez, presidente del CES, en días pasados.

“Se le quiere engañar al pueblo ecuatoriano diciendo que la UCE no quiere ascender a la excelencia y que solo quiere tener “panas” de tercer nivel. Yo les invito, mis queridos “panas”, a que lean el artículo 23 del Reglamento de Carrera”, señaló. La disposición establece que se puede contratar a profesores de tercer nivel siempre que hayan prestado servicios relevantes al país y ello lo califica la universidad en pleno uso de su autonomía.

De su lado, el miembro del CES, Enrique Santos, dijo que el promedio de edad de los docentes universitarios es de 50 años, por lo que tanto no habría el riesgo de que se jubilen inmediatamente e invitó a las universidades a renovar su planta de maestros.