Con una inversión superior a los 18 mil millones de dólares en el área social y con lo cual se amplió la  gratuidad de la salud y la educación, hoy se evalúa el Plan Nacional del Buen Vivir que fue la hoja de ruta del Gobierno de Rafael Correa, desde su posesión en el 2007 hasta diciembre del año pasado.

Aunque todavía no se han logrado cambios profundos en algunos aspectos  de la economía,  sobre todo en el modelo de acumulación y   la estructura de la propiedad,  la inversión social permitió   incrementar  la cobertura  médica, que un 7,9% más de  jóvenes  ingrese a la universidad y que el 43,8% de los hogares ecuatorianos cubra sus necesidades básicas (acceso a servicios, calidad de vivienda, entre otras).

El cambio más relevante se da entre los  indígenas y afroecuatorianos, cuya tasa de matrícula se incrementó entre un 7,5% y 8,3%, respectivamente.  La cifra es mucho mayor entre los jóvenes de 18 a 24 años que pertenecen al quintil más pobre, en donde la tasa creció del  7,1% al 17,2%. No obstante, el acceso sigue siendo mayor en la zona urbana (38,1%) frente al área rural (15,2%).

En el sector salud, las estadísticas revelan que cada vez más ecuatorianos acuden al sistema público, pues si en el 2007 se atendían 95 consultas por cada 100 habitantes, para el 2010 la cifra creció a 243. Es decir, que cada paciente se atendió  por más de dos ocasiones  en  los hospitales públicos.

Otro puntal del Gobierno fue la atención a las personas con discapacidad, a quienes se les entregó  12.298 bonos Joaquín Gallegos Lara para la manutención de  quienes  padecen  discapacidad severa,  con una   inversión de 19’524.240 dólares, a más de chequeos  médicos y la entrega de ayudas  técnicas.

Para mejorar el desarrollo de capacidades  de los ecuatorianos, el Gobierno también ha puesto énfasis en la inversión para ciencia y tecnología, cuyo presupuesto creció del 0,20% del  PIB en el 2006 al 0,48% en el 2010, con  la meta de alcanzar el 1,5% del PIB en el 2013.

El informe, elaborado por la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo (Senplades) y que será presentado hoy al Presidente de la República, reconoce además que “Nos urge una verdadera revolución agraria”. Y precisa: “Es necesario redistribuir y facilitar el acceso a activos productivos (tierra, agua, crédito, información, conocimiento y tecnología) y mercados, recuperar los suelos, proteger las cuencas hidrográficas y la agrobiodiversidad, privilegiando a los pequeños y medianos productores/as rurales”.

La información completa de la evaluación usted la puede ver en nuestra página web (www.eltelegrafo.com.ec), además de las web del Gobierno Nacional.

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