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Ecuador, 23 de Diciembre de 2024
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El Telégrafo

Durante varios años, los extrabajadores exigieron la cancelación de los valores adeudados

Claro inició el pago de reliquidación de utilidades a exempleados

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Los extrabajadores, directos y tercerizados de Conecel, que opera en el Ecuador bajo la marca Claro, acudieron este sábado por la mañana, al Hotel Howard Johnson, en Quito, para recibir la reliquidación de utilidades correspondientes a 2006.

Washington Andrade, abogado de los exempleados de esta empresa, aseguró que el monto que les adeudan asciende a $22 millones. “2006 fue el año en que más utilidades se generaron en esta compañía”.

Andrade indicó que así como Conecel realiza el pago bajo protesta, los exempleados decidieron seguir la misma línea, reservándose, además, el derecho a revisar los montos. El abogado también cuestionó el hecho de que Conecel no diera a conocer el universo de beneficiarios de esta reliquidación.  Según él, el Ministerio de Relaciones Laborales ofreció proporcionar esa información, así como la base de cálculo, indispensable para saber si los exempleados recibieron lo que les corresponde. Por otro lado, el proceso de pago que corresponde a los años 2003, 2004 y 2005 se suspendió, según Andrade, de forma totalmente arbitraria.  En este sentido, explicó que el  artículo 106 del Código de Trabajo determina que las utilidades no repartidas deben depositarse en la cuenta del Banco Central del Ministerio de Relaciones Laborales. No obstante, según Andrade, el ministro Carlos Marx Carrasco consideró que este proceso no sería necesario ya que Conecel se comprometió a realizar los pagos respectivos. El representante de los extrabajadores señaló que espera que todos los excolaboradores consten en los listados de Conecel, sin personas excluidas. Uno de los exdependientes, que prefirió no ser identificado, comentó que el monto recibido fue menor al que debía percibir. “Hemos esperado 8 años para recibir un pago que no sabemos cómo se calculó. Alguien debería darnos una mínima explicación”, acotó. Mónica Oviedo, oriunda de Santo Domingo, ingresó a Conecel a finales de 2006 y, según señaló, hasta ese año, la empresa no pagaba utilidades. “Recién en 2007 dijeron que iban a pagar, pero lo que correspondía a ese año, nos cancelaron en 2008”. En 2011, comentó, se enteró de que había una demanda por parte de los exempleados por el pago de las utilidades de 2006, así que decidió unirse al reclamo. El sábado acudió al Hotel Howard Johnson para recibir el monto correspondiente a 2006.

Andrade indicó que este lunes 18, el proceso de pago se realizará en Guayaquil y que estarán vigilantes.

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