Canciller Patiño arriba a Alemania para buscar apoyo a iniciativa ambiental
El ministro de Exteriores del Ecuador, Ricardo Patiño, arribó a este miércoles a Alemania donde se reunió con su homologo, Guido Westerwelle. El diplomático inició la semana pasada una gira por Europa y Asia, que abarca un total de 7 países.
El objetivo de las reuniones es lograr apoyo económico para la propuesta ecuatoriana de dejar el petróleo bajo tierra en el yacimiento Yasuní-ITT, sin embargo varios funcionarios del gobierno europeo anticiparon su rechazo a cualquier tipo de donación, debido a la crisis económica internacional.
Como parte de su agenda, el canciller Patiño pronunciará un discurso ante la Asociación de la Industria y las Cámaras de Comercio Alemanas (DIHK), asimismo mantendrá contactos con empresarios alemanes.
Las entrevistas con potenciales inversores y fortalecer las relaciones económicas son el objetivo central de la gira que además marca el relanzamiento del proyecto medioambiental.
El principal opositor del proyecto en Alemania es el ministro de Cooperación y Ayuda al Desarrollo, Dirk Niebel, quien además criticó a otros países como Italia por apoyar la propuesta.
Sin embargo, cuatro parlamentarios alemanes, de las filas gubernamentales y de la oposición, visitaron la semana pasada Ecuador para analizar in situ el proyecto y entrevistarse con científicos y expertos, además de indígenas de la región.
Ecuador aspira a una contribución internacional de al menos USD 3 500 millones para no extraer el petróleo y evitar la emisión de 410 millones de toneladas de dióxido de carbono.
El parque Yasuní, creado en 1979 y declarado Reserva Mundial de la Biósfera 10 años más tarde, abarca 982 mil hectáreas de la cuenca del alto Napo.
La iniciativa cuenta actualmente con USD 50 millones, de los cuales USD 46 millones provienen del canje de deuda de Ecuador con Italia, y el resto principalmente de aportaciones de Chile, Perú, España y Colombia.
Hasta el momento, los principales contribuyentes al proyecto han sido España, con una aportación de USD 1 millón, y Chile, que comprometió USD 200 mil.