Agrupación regional critica reacción de diarios foráneos
La Unión Latinoamericana de Agencias de Noticias publicó ayer un remitido oficial, firmado por su secretario general, Freddy Fernández, en la que critica la postura adoptada por medios internacionales que rechazan la sentencia en contra de Carlos, César y Nicolás Pérez, directivos de diario El Universo; y de Emilio Palacio, ex editor de opinión de ese rotativo, dentro de la demanda interpuesta por el presidente Rafael Correa por injurias calumniosas.
En el texto, reproducido ayer por la agencia Andes, Fernández reflexiona que “en América Latina, una región en la que los dueños de grandes medios de comunicación han mantenido de rodillas al poder político, una sentencia de estas características produce una violenta reacción editorial de todo el club de propietarios de grandes medios”.
El titular de esta agrupación les recuerda a los medios que ahora intentan minar la imagen del régimen que “las demandas particulares para exigir el apego a la verdad de los medios de comunicación son más frecuentes de lo que los propietarios de medios están dispuestos a reconocer. En Estados Unidos y Europa ocurren con total normalidad, sin que nadie se rompa la camisa diciendo que se trata de un atentado contra la libertad de expresión”.
Fernández acude a los libros publicados por el periodista sueco Stieg Larsson para reforzar la tesis planteada en su escrito.
Es así que Larsson advierte en “La reina en el palacio de las corrientes de aire” -el tercer libro de la trilogía Millenium-, que si bien todo concepto de democracia se centra en la libertad de expresión, “no significa que esté todo permitido, algo que ciertos fundamentalistas de la libertad de expresión -sobre todo pedófilos y grupos racistas- intentan defender en el debate político-cultural”.
Continuando con este texto, el comunicador sueco explica que las limitaciones a la libertad de expresión se establecen en la Ley de la Libertad de Prensa de cada nación y son cuatro: “Está prohibido publicar pornografía infantil y ciertas descripciones de violencia sexual independientemente del nivel artístico que el autor pretenda imprimirles.
Está prohibido incitar a la revuelta y animar a cometer delitos. Está prohibido difamar o calumniar a otra persona. Y está prohibido acosar a un grupo étnico”.
Estas ideas son recogidas por el titular de la Unión Latinoamericana de Agencias de Noticias, quien cierra su texto público parafraseando a Stieg Larsson, quien afirma que “esas limitaciones de la democracia son aceptables, tanto social como democráticamente”, y que “la esencia de la legislación reside en que ningún ser humano tiene derecho a acosar o humillar a otra persona”.