A la espera de los resultados del ADN
En Ciudad Juárez, México, las autoridades están a la espera de los resultados del examen de ADN practicado a los familiares de la niña Nohemí Alvarez, para iniciar la repatriación de su cuerpo hasta Ecuador.
Según el cónsul en Monterrey, Francisco Torres, no se sabe con exactitud cuándo puedan llegar los informes.
“Esperemos que sea hasta el viernes cómo máximo, para realizar las demás gestiones”, dijo.
Hasta tanto, el cadáver de la menor sigue en el Servicio Médico Forense a cargo de la Unidad Contra Delitos de Ciudad Juárez. En paralelo continúan con las investigaciones para determinar las causas del deceso. Torres dijo que el Consulado de Ecuador en Nueva York mantiene contacto con los padres de la pequeña. “Les damos asistencia psicológica permanentemente y estamos buscando que nos entreguen la documentación y de nuestra parte, entregamos toda la información a la familia”, expresó el diplomático.
Luego de que sean conocidos los resultados del ADN de la menor, sostuvo, el cuerpo será repatriado.
“Todos los gastos corren por parte del Gobierno ecuatoriano, ya que el Viceministerio de Movilidad tiene este encargo”, añadió.
La niña Nohemí Álvarez fue encontrada sin vida, en un centro de asistencia en México la semana anterior. Las autoridades investigan si fue un suicidio o un crimen cometido en contra de la chica oriunda de la provincia de Cañar.
NO SABEN QUIÉN LA DEJÓ EN LA FRONTERA
En el periódico, El Diario de Ciudad Juárez, se informa que Nohemí tardó un mes en llegar hasta la frontera entre México y Estados Unidos.
En la casa de Domingo Fermas Uves y su esposa Isabel Padilla García, la joven migrante ecuatoriana permaneció 24 horas esperando ser internada sin papeles al vecino país del norte. “A mi esposo se la dieron para que la pasara, pero él no pasa gente”, afirma la mujer.
Asegura que no sabe quién entregó la menor a Domingo. Tiene claro que no le pagaron ni un cinco.
Ella cree que “alguien los mencionó” porque de lo contrario no se explica la intervención policiaca.
Afirma que su cónyuge llegó a la casa con la niña después de que personas que no conoce se la entregaran para que la llevara a Estados Unidos.
La menor llegó a esta vivienda el 5 de marzo y el operativo de la Policía fue el día 6, a las 9 de la noche.
“Nosotros no sabemos. Yo no conozco a nadie, la niña se la entregaron a él, se la trajeron a la casa, por dónde la pasarían”, dice Isabel.
Contó que desde la llegada de Nohemí, permaneció en silencio y solo respondía a las preguntas que le realizaban.
“Era muy seriecita. Estaba como con miedo. Me contestaba sí o no. No me hablaba. Ella estaba bien calladita”, recuerda.
A la pequeña la entregaron de noche y no portaba ni chamarra ni mochila ni documentos.
Isabel afirma que le ofreció el baño para que se aseara, pero lo rechazó. “No quiso bañarse, solo traía la ropita puesta y venía sencillita y para dormir la acostamos con Karen, mi hija que está discapacitada porque no camina”, agrega.
“Yo le pregunté cuántos años tenía y me respondió que 12 años, señaló la mujer a la periodista de El Diario, Luz del Carmen Sosa.