La Junta Distrital de Resolución de Conflictos del Ministerio de Educación resolvió que 23 de 68 estudiantes del colegio Mejía retornen a clases a partir de mañana, viernes.

Sin embargo, aún faltarían 45 informes por resolver, que se esperan que se analicen en los próximos días. "Serán procesados con la celeridad que el caso amerita", señaló la Cartera de Educación, mediante un comunicado de prensa.

Recordaron que los estudiantes recibieron la imposición de acciones educativas disciplinarias de suspensión por 30 días. "La sanción disciplinaria tomó en cuenta el tiempo que los estudiantes ya estuvieron suspendidos", citan.

A pesar de ello, desde ayer un grupo de padres de familia realizan una protesta pacífica en los exteriores del colegio. María Domínguez, madre de familia, señaló que estarán en las afueras del plantel todos los días hasta que su hijo retorne a clases.

Gonzalo Realpe, abogado de los estudiantes, señaló que luego del dictamen de la Corte provincial no hay ningún motivo para que los alumnos no regresen a las aulas.

Los estudiantes fueron detenidos el pasado 18 de septiembre por protagonizar protestas violentas.

En este caso, el 3 de octubre, la jueza Marcela Mayorga sentenció a 2 meses de prisión a 16 sindicados como autores del delito de daño a bien ajeno, tipificado en el artículo 204 del COIP.

Dentro de la misma causa, otros 38 acusados en el grado de cómplices recibieron una pena de 1 mes de prisión, pero fue suspendida a cambio de trabajo comunitario, pago de $ 60 para cubrir los daños ocasionados y la prohibición de reincidir en actos similares por 2 años.

La protesta callejera motivó la captura de 60 personas, la mayoría estudiantes del mencionado plantel. El fiscal Javier Bosquez aceptó procesar el caso como un juicio abreviado, ya que los implicados aceptaron su responsabilidad, lo que los benefició con una pena más benigna.