El colocarse un par de implantes en el cuerpo,  con un valor menor a $ 600,    que no vengan acompañados por  un certificado de la Asociación Federal de Drogas y Alimentos de Estados Unidos (FDA) y del Instituto Nacional de Higiene (INH) podría resultar peligroso a corto o largo plazo, explica María Franco, presidenta de la Sociedad Ecuatoriana de Cirujanos Plásticos (Secpre).

Desde que se descubriera que los  Poly Implant Prothesis (PIP) habían sido  fabricados con material de uso industrial, treinta y dos mujeres ecuatorianas  se encuentran realizando las ecografías y exámenes pertinentes para el retiro de los objetos extraños de su cuerpo.

El Ministerio de Salud Pública (MSP) y el  gremio de médicos de la cirugía plástica ofrecieron sacar los implantes   de forma gratuita; no obstante hasta el momento en la Dirección Provincial de Salud del Guayas no se han registrado solicitudes para acceder al servicio.

Franco asegura que los implantes más utilizados en el país son producidos por las marcas Silimed y Alergan.
Los precios de esos productos que cuentan con todas las seguridades sanitarias van desde los $ 600 (los más baratos) hasta los $ 1.500.

La doctora confirma que en la ciudad se están ofertando implantes de procedencia china, los cuales  no cuentan con las garantías sanitarias para las usuarias, pese a que pueden ser más baratos.

“Hay prótesis lisas y texturizadas, estas últimas tienen mayor demanda, aunque cuestan más, producen menor contractura muscular, es decir permiten que los senos se vean como piedras”, señala Franco.

El cirujano plástico Rodrigo Toscano asegura que los implantes que tienen más capas de cobertura en su superficie resultan seguros.

“Esto los hace resistente con el tiempo, así se previenen las roturas”, dice.
Costa Rica, Francia, Irlanda, China, Brasil y Holanda son los únicos países autorizados por el Instituto Nacional de Higiene (INH)  para importar al país las marcas: Silimed, Naturelle, Sebin, Motiv Implant, Michan y Mentor.

El médico recomienda el retiro del implante PIP, tanto si se han roto las prótesis como si la paciente sufre molestias como dolor, inflamación o deformidad del seno.

¿Deben colocarse remplazos cuando se han  retirado los PIP? Franco dice que solo puede hacerse después de realizar una mamografía: “Si la paciente no tiene mastitis, es decir, una inflamación aguda de las glándulas mamarias, se puede poner otro implante”.

En el caso de encontrarse complicaciones con el tejido, la mujer deberá recibir un tratamiento con antibióticos y desinflamatorios, esperar entre seis meses y un año a que el tejido se encuentre sano y solo en este caso colocar el remplazo.

Los implantes PIP y  el cáncer

La Agencia Francesa de Seguridad Sanitaria y Productos de la Salud anunció que no se ha encontrado relación entre el cáncer que desarrollaron 20 usuarios de las PIP  y la colocación de los implantes, aunque recomienda su extracción porque su contenido los hace más susceptibles a posibles rupturas.

En Ecuador, donde circularon 4.000 prótesis, no se han emprendido acciones legales contra la empresa que las producía.

En  cambio, cientos de mujeres venezolanas y argentinas han realizado  demandas contra PIP.
Arie Alimi, representante legal de 500 argentinas, se encuentra exigiendo al Estado francés y a la Unión Europea la creación de un fondo de indemnizaciones para las afectadas extranjeras.

Las PIP, que ingresaron al Ecuador en el 2005 y se utilizaron hasta el 2008, contaban con un registro sanitario que fue revocado por el INH.