La rutina cambió para el abogado Hernán Jaime desde hace un par de semanas cuando en el Parque del Centenario se restringió el acceso a una sola entrada que conecta el emblemático lugar con la calle Lorenzo de Garaycoa y la av. 9 de Octubre.

El profesional del Derecho solía entrar por el lado que da hacia el malecón Simón Bolívar, rodear la Columna de los Próceres y dirigirse hacia la Corte Provincial de Guayas.
“De cuando en cuando, tomaba un pequeño descanso bajo los árboles de la plaza”.

Ahora Jaime ingresa y sale por una sola puerta, lo que obliga al ciudadano y a cientos de transeúntes a rodear el parque, sea por la calle Vélez, la Pedro Moncayo o la 1° de Mayo, para llegar a otros puntos.

Desde este mes, el Municipio de Guayaquil inició un plan de mantenimiento integral del sitio en el que se mejorarán los aspectos visuales, ambientales y de seguridad ciudadana, explicó Jorge Rodríguez, vocero del Cabildo.  

El Parque del Centenario fue objeto del robo progresivo de cables, recipientes para desechos y partes de bancas. Incluso, el espacio era utilizado por delincuentes y consumidores de drogas que se “adueñaban” de rincones apartados.

La situación se presentaba particularmente entre la tarde y noche, aseguró Wálter Cedeño, quien trabaja como betunero en este lugar desde hace 10 años. “En la noche es más peligroso porque por las esquinas falta iluminación”.

Ante estos hechos, el Cabildo triplicará las luminarias y aumentará la seguridad con la contratación de guardianía privada que se sumará a los metropolitanos que ya están asignados al lugar.

Sin embargo, no se prevé el aumento de la altura de la cerca como ocurrió en el Malecón 2000. El vocero del Cabildo recordó que el Parque del Centenario está concesionado al Banco Pichincha “y es la institución la que debe mantenerlo”.

En Guayaquil, existen sitios como los parques Huancavilca, Ramón Unamuno y La Atarazana, inaugurados por la Empresa de Parques Urbanos y Espacios Públicos, que no requieren de rejas para preservar sus luminarias y mobiliario.

Rodríguez justificó las medidas adoptadas en el Centenario por los problemas de seguridad. En este sentido, exhortó a la ciudadanía para que colabore con el cuidado del espacio recreativo y que denuncie a quienes hagan mal uso del mismo.

El objetivo es rescatar a una de las plazas más antiguas de la ciudad. En lo que respecta a la obra física, la Dirección de Áreas Verdes hizo un primer desembolso de $298.000, aproximadamente.

Los trabajos -que concluirán este mes- incluyen el cambio parcial de la vegetación, reemplazo de adoquines, colocación de 36 tachos de basura y 28 postes para luminarias.

“Estamos terminando la parte eléctrica de la obra”. El Parque del Centenario está incluido dentro de un proyecto para colocar luces LED a lo largo de la av. 9 de Octubre, desde el malecón Simón Bolívar hasta Pedro Moncayo. Su inauguración está prevista para el último trimestre del año.

En cuanto a sitios similares de la zona céntrica, el Municipio efectúa, dos veces al año, el mantenimiento de los parques San Agustín, Victoria y Seminario. En este último se procedió a reemplazar parte del mobiliario y otros objetos metálicos. (I)