El fenómeno ‘El Niño’ se forma en la zona del Pacífico Oriental. Lo único incierto es su intensidad y duración. Estas afirmaciones son parte del último informe del Centro Internacional para la Investigación de este fenómeno (Ciifen).

Los resultados de los estudios, publicados el 2 de junio, indican que existe el 80% de probabilidades de que ocurra el fenómeno. “Ya no debemos hablar de probabilidades, sino del desarrollo del evento”, afirma Rodney Martínez, coordinador científico del Ciifen.

Él explica que la temperatura del océano Pacífico se incrementa y que, el mes pasado, el nivel de las aguas aumentó en las costas sudamericanas como resultado de las “perturbaciones de los vientos en la superficie marítima”.

Una variante en la situación es que la onda cálida avanza directamente hacia la región central y sureña del continente, en lugar de dirigirse primero hacia el norte, como ocurrió en el año 1997.

Según Martínez, es la primera vez que ocurre esta fluctuación. Para el pleno desarrollo de ‘El Niño’, la velocidad de los vientos en el borde oriental del Pacífico debe disminuir “y ya hay indicios de eso, pero toca definir aún la intensidad y duración del fenómeno”.

La información fue compartida durante un taller realizado en la Prefectura de Guayas. En el encuentro, además, se conformó el Comité de Emergencia Provincial.

Al respecto, María del Pilar Cornejo, secretaria de Gestión de Riesgos (SGR), adelantó que los gobiernos autónomos descentralizados (GAD) deberán asumir los gastos que generen las reparaciones de daños ocasionados por las precipitaciones.

En caso de que las autoridades seccionales lo requieran podrán solicitar un crédito bajo la modalidad 50/50 al Banco del Estado. La ayuda consiste en la presentación de un proyecto ante la entidad crediticia para obtener recursos que financien las obras, pero con un beneficio que garantice el pago del 50% del valor que solicitó el Municipio.

El impacto se presentará inevitablemente en las zonas bajas y aquellas proclives a deslaves tal como ocurrió en 2008 y 2012 durante eventos moderados.

Los sectores Nueva Prosperina, Paraíso de la Flor, Bastión Popular y la Trinitaria, en Guayaquil, poseen las características referidas por la SGR.

El gobernador del Guayas, Rolando Panchana, ratificó que la responsabilidad por los daños que ocurran en los sitios vulnerables es de los municipios, porque estas instancias determinan el uso del suelo.

Además, aseguró, los ayuntamientos deben realizar los desalojos de las casas que están en situación de riesgo. A inicios de esta semana, la Secretaría Técnica de Prevención de Asentamientos Humanos Irregulares (Stpahi) obtuvo información donde existe este tipo de viviendas en 8 cantones de la provincia.

La Gobernación, en caso de que así lo requieran los cabildos, “apoyará con la fuerza pública”.

Al ser consultado sobre acercamientos con el alcalde Jaime Nebot para coordinar acciones conjuntas que ayuden a mitigar el impacto de ‘El Niño’, Rolando Panchana expresó que se ha invitado al burgomaestre a las reuniones de autoridades de la provincia pero que no ha asistido.

Mientras que, Nebot manifestó, en días pasados, que las anegaciones o inundaciones que pudieran presentarse por el evento climático será por la falta de dragado en los ríos Guayas, Daule y Babahoyo.

En ese sentido, responsabilizó al Gobierno Nacional por la falta de acciones en el sector y advirtió que si no se retira el sedimento de los ríos, el Gobierno no puede culpar al sistema de alcantarillado. “Guayaquil no tiene falta de drenaje”.

El funcionario agregó que el Cabildo porteño desarrolla un programa de emergencias junto a la Corporación de Seguridad Ciudadana local. También se adquirirán plantas múltiples de luz y agua potable.

Datos

En total, según datos históricos del Ciifen, se presentaron 9 fenómenos calificados de fuertes entre 1578 y 2014.

Entre 1982 y 1983, ‘El Niño’ causó pérdidas económicas por alrededor de $ 2.000 millones en Ecuador y Perú.

En el período 1997-1998 se registraron más de 1.000 damnificados en el Guayas por el fenómeno. En el resto del territorio nacional los daños alcanzaron la suma de $ 4.000 millones.

En 2008 fueron afectadas 1.200 familias debido a las inundaciones y deslaves en el país.