Bomberos niegan permisos para quema de gigantes
El Benemérito Cuerpo de Bomberos de Guayaquil (BCBG) anunció que no otorgará permisos para quemar los ‘años viejos’ gigantes elaborados en distintos puntos de la ciudad.
La decisión se tomó como medida adicional a la propuesta realizada hace casi tres semanas de que los monigotes sean desmantelados y destruidos en lugar de quemados.
En 2015, varias personas, entre ellas un paramédico del BCBG, resultaron con heridas en sus cuerpos, durante la quema de uno de los muñecos, en las calles 15 y Capitán Nájera, en el centro-oeste de la ciudad.
El percance se presentó luego de que una persona arrojara una gran cantidad de explosivos, lo que ocasionó que pedazos de madera y clavos salieran disparados en varias direcciones, explicó Santiago Peña, jefe de Prevención de Incendios del Cuerpo de Bomberos.
Puntualizó que no están en contra de la fabricación de los ‘años viejos’ pero “no hay forma de controlar a los ciudadanos que lanzan explosivos de varios tipos, sin medir las consecuencias”.
Hay creaciones que llegan a superar los 15 metros de altura y Peña considera que no existen medidas de seguridad que puedan ser aplicables en la quema porque hay un alto riesgo para las casas, que en su mayoría son de construcción mixta, y para cables de telefonía, televisión y de fluido eléctrico que en muchos casos cuelgan como tallarines en todo el sector del Suburbio Oeste.
Sin embargo, Xavier Narváez, director de Justicia y Vigilancia del Municipio de Guayaquil, anunció la semana pasada que la propuesta de los bomberos de desmantelar los monigotes en lugar de quemarlos fue rechazada por el Cabildo guayaquileño.
“No se va a coartar el derecho a los artesanos” de destruir sus creaciones como lo consideren y que “con las debidas precauciones, no representan peligro alguno”, aseguró, sin tomar en cuenta las explicaciones técnicas del cuerpo de bomberos.
El Municipio implementará un cronograma para proceder a la quema de los enormes muñecos elaborados en el Suburbio Oeste, para lo cual, incluso, se elaboró una ruta turística de fin de año.
Narváez solicitó a las Fuerzas Armadas que den apoyo logístico durante la quema que inicia este viernes 5 de enero.
La propuesta formulada por el BCBG tenía por objetivo reducir los índices de contaminación y peligrosidad que representa la quema de estos monigotes.
A criterio de las autoridades del organismo de socorro, durante la quema de los ‘años viejos’ pueden suceder acciones descontroladas producto de la ingesta de bebidas alcohólicas y uso indebido de combustibles y explosivos, que es lo que se busca evitar.
Los bomberos de Guayaquil mantienen reuniones periódicas con la Policía y los artesanos para llegar a un acuerdo.
Durante la quema regular de los años viejos, el 31 de diciembre de 2016, no se generaron emergencias.
Según los ciudadanos, el uso de material explosivo y pirotécnico ha bajado en comparación con otros años. Carla Pérez consideró que en 2015 hubo muchos más juegos pirotécnicos y reventadores.
Los bomberos de Guayaquil, varias semanas antes de la llegada de fin de año, emprendieron una campaña masiva de información sobre los peligros de manipular material explosivo.
Igualmente, la Policía Nacional colaboró en la iniciativa con la consigna de que toda la pirotecnia conlleva algún grado de peligro, pues se elabora con pólvora. (I)