La tecnología por sí misma no es una solución para mejorar la calidad educativa. Aunque profesores y estudiantes tengan a la mano computadoras y aplicaciones de última generación, la tecnología es solo una herramienta más. La fórmula para elevar el nivel de enseñanza y aprendizaje es otra y lo saben quienes se han especializado en el desarrollo de herramientas educativas.

Jaime Castro, especialista en nuevas tecnologías, advierte que la clave está en saber fomentar el uso inteligente de cada herramienta que ingresa al centro educativo.

“La idea es que las máquinas sean utilizadas de tal manera que propicien la interacción y mejoren las destrezas”. Hoy en día, hay muchas aplicaciones informáticas que están diseñadas para potenciar las actividades educativas que no solo involucran a los estudiantes, sino también a las áreas administrativas y contables de la institución.

Hay en el mercado diferentes soluciones tecnológicas creadas por programadores de diferentes nacionalidades. En la última década, una de las plataformas educativas que ha ganado terreno en el país es Academium, desarrollada por un equipo de programadores ecuatorianos que integran Omnisoft, una empresa especializada en el diseño de herramientas orientadas a facilitar la vida educativa. Quien ideó esta plataforma es Marco Jarrín, catedrático e investigador, quien después de especializarse en Inteligencia Artificial en Bélgica regresó al país para materializar una idea de negocio que apuntaba a crear soluciones informáticas eficaces, pero, sobre todo, útiles para el sector educativo.

A la herramienta la denominó Academium, una red virtual que permite la interacción entre los estudiantes y los profesores de una manera directa y permanente. “Esta red mantiene a los padres de familia informados de los progresos, logros y falencias de sus hijos, ya que estos tienen un acceso total a toda la información referente a los alumnos, sus deberes, calificaciones y diferentes observaciones de los profesores”, puntualiza Jarrín. Todos los datos considerados esenciales, como niveles de acceso, pénsums, información del alumno, entre otros, son manejados, a través de un módulo al que solo tienen acceso los funcionarios designados por las autoridades de la institución educativa.

Para facilitar su uso, los programadores estructuraron este programa en varios módulos, todos cumplen una función diferente. Así, por ejemplo, el módulo de agenda virtual permite, entre otras posibilidades, la creación y administración de tareas, recordatorios, asignación de deberes. También se destaca la opción Favoritos que permite ingresar direcciones web importantes y asignarlas por grupos de trabajo. Esta plataforma también integra el módulo Almacén Virtual, el cual permite a los padres de familia y alumnos comprar útiles escolares, libros o cualquier otro artículo, a través de esta Red Virtual Educativa.

Los padres y alumnos pueden visualizarlos, porque el sistema permite colocar una galería de imágenes con todos los detalles de los diferentes artículos ofertados. Estos son apenas 2 de los módulos que contempla el sistema, concebido de manera integral, porque cubre todos los requerimientos de una unidad educativa tanto privada como pública.

Esta herramienta está concebida sobre el concepto de ERP (sistemas de planificación de recursos empresariales) que se caracteriza por administrar la producción, logística, distribución, inventario, envíos, facturas y contabilidad de la compañía de forma modular.

Al ERP pueden acoplarse a todo tipo de requerimientos. Puede ser utilizado para atender a más clientes, fabricar más productos o procesar más facturas. Esto depende de la estrategia u orientación de la empresa.

Al principio, únicamente 3 colegios utilizaban el sistema; hoy son 62 y la mayoría son planteles religiosos de diferentes provincias del país.

Aplicaciones en el aula

Las tecnologías de la información constituyen un elemento imprescindible en el ambiente educativo. Cada vez hay más herramientas orientadas a los profesores y estudiantes, como la computación en la nube, mediante la cual es posible acceder a recursos y servicios informáticos de utilidad para la comunidad educativa, sin necesidad de tener instalados programas específicos en las computadoras particulares o sin llenar el disco duro con documentos o aplicaciones.

De acuerdo con la revista Consumer, las plataformas escolares, la gestión de tareas para los alumnos o la comunicación entre familias y colegios son algunos de los servicios que se pueden administrar por medio de Internet. Con la computación en la nube es posible ahorrar en gastos de software, pero, además, se fomenta un entorno de trabajo cooperativo y se facilita el acceso a las herramientas educativas desde una gran variedad de dispositivos móviles. Para hacer uso de esta tecnología, los planteles educativos solo necesitan una conexión a Internet. Una de las ventajas de la tecnología es que facilita los entornos colaborativos. De esta manera, un profesor ecuatoriano puede entablar una comunicación con un docente argentino y, al mismo tiempo, coordinar un trabajo sobre el sistema solar que realizan de forma conjunta los alumnos de ambos docentes.

Gracias a la computación en la nube es posible intercambiar ideas, imágenes, textos y mantener un contacto virtual periódico y fluido. Esto es posible gracias a los denominados entornos colaborativos, lugares de trabajo virtuales en los que la localización geográfica de los participantes no supone ningún obstáculo.

EN EL COLEGIO

Una red en la que la información siempre se comparte

“Desde hace 5 años, la Unidad Educativa La Condamine implementó un sistema que integra a padres de familia, alumnos y al personal administrativo de este centro educativo. Se denomina Pronote y está instalada en la gran mayoría de liceos franceses en el mundo.

Se trata de una plataforma que facilita el manejo de la vida escolar. A los padres les permite acceder a las calificaciones de sus hijos e identificar si estos han recibido sanciones. También están en la capacidad de llevar un registro pormenorizado de las ausencias de sus hijos. Para evitar que personas ajenas al sistema ingresen a la plataforma, cada padre tiene su contraseña.

Al ser desarrollado por una empresa especializada en crear aplicaciones educativas, tenemos la ventaja de que está siendo actualizada de forma constante. Cada día aparecen nuevas versiones de este sistema y cuando es necesario la plataforma se ajusta a las necesidades de cada plantel. También trabajamos con el sistema EDT, al cual consideramos la mano derecha del Pronote. Esta herramienta fue creada para diseñar los horarios de clases en todo el plantel”.

Christian Paredes, administrador de tecnología informática de la Unidad Educativa La Condamine