El presupuesto diario aumenta entre 33% y 50% al salir de vacaciones. Planificar estos días con anticipación es esencial para no desfinanciar la economía familiar.

Así lo explica Natalia Garzón, directora ejecutiva de la Fundación Bienestar. Aconseja que la decisión de qué hacer o a dónde ir debe estar directamente relacionada con lo que la familia puede pagar.

Al planificar las vacaciones se deben tomar en cuenta todos los gastos que se realizarán, como movilización, hospedaje, alimentación, actividades de recreación, incluso la compra de recuerdos. “Muchos ecuatorianos quedan con deudas de sus vacaciones. Lo ideal es que regresen sin ellas, que costeen sus viajes con ahorros”, comenta Garzón.

A criterio de Andrea Merino, jefa de proyectos de Fundación Crisfe, no toda la gente puede ir de vacaciones con el 100% de dinero generado del ahorro. Sin embargo recomienda que el porcentaje de deuda no pase del 50% de lo presupuestado para este tipo de actividades.

Merino asegura que las vacaciones se deben planificar a inicios de año o por lo menos cuatro meses antes. Así se podrá ahorrar con ese fin. “Si no se planifica se recurre al endeudamiento, a sacar plata de donde no se tiene”, explica Merino.

Se debe recordar que después de las vacaciones vienen gastos importantes para la familia, con la entrada a clases de los hijos. Además, sí es posible viajar sin tener que gastar tanto.

Para ello ambas especialistas en finanzas familiares aconsejan hacer las reservas de hotel o de movilización, por ejemplo, con anticipación, para acceder a mejores precios o promociones.

Además se puede optar por lugares turísticos baratos o alquilar una vivienda donde se pueda cocinar. También hay actividades económicas y gratuitas que permiten disfrutar momentos de calidad dentro de la ciudad o cerca de ella.

Merino recuerda que así sean vacaciones, se debe ahorrar. Este debe ser un rubro fijo cada mes, de al menos el 10% de los ingresos. (I)