Ante la disposición del presidente Lenín Moreno del cese de la entrega de concesiones mineras, el ministro de Minería, Javier Córdova manifestó que se encuentra en marcha un proceso de evaluación de las concesiones entregadas para determinar el cumplimiento de las normas establecidas en la Constitución, así como los requerimientos de ley.

La decisión de detener la entrega de concesiones, mientras no se haga una evaluación para determinar si existe el cumplimiento de todos los procedimientos ambientales que manda la norma, fue tomada luego de una reunión del Primer Mandatario con dirigentes de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie).

El ministro Córdova explicó que durante 2017 fueron presentados 1.000 pedidos de concesión, de los cuales fueron entregados 300 y aún resta definir el futuro de las otras 700 solicitudes. Aclaró además que todas estas entregas fueron para la fase de exploración, lo que no significa que estos proyectos, lleguen a fase de producción.

“Por ejemplo, de los 300 proyectos mineros concesionados, apenas tres podrían llegar a fase de explotación”, explicó el funcionario, tras la presentación de la XI Expominas, prevista para abril de 2018, evento que proyecta reunir a más de 100 empresas nacionales e internacionales.

Puntualizó además que le presentará al Jefe de Estado un informe de los 300 otorgamientos entregados y una planificación para 2018 en la que se plasmen las expectativas acerca de nuevas concesiones, para que sea el Presidente, quien decida.

“Para 2013 el 10% del territorio estaba concesionado. Hoy vamos a terminar 2017 con el 5 % de concesión. Pese a que terminamos de entregar en el transcurso del año unas 300, estamos a la mitad de lo que teníamos en 2013”, subrayó el funcionario.

Empresarios sugieren una normativa
En el evento surgieron varias críticas a la empresa EcuaCorriente S.A. (ECSA), la subsidiaria ecuatoriana del consorcio chino CRCC-Tongguan y concesionaria del proyecto Mirador, pues estaría dando prioridad a la subcontratación de empresas de China y no a ecuatorianas.

“No puede ir una concesión minera de la mano con la impunidad. Tener una licencia minera significa ser un socio estratégico del país y someterse a las leyes y propender para que el Estado se desarrolle”, cuestionó Diego Rivadeneira, de la empresa Bompaisa SA.

Agregó que las concesiones mineras tienen la obligación de procurar al desarrollo del sector productivo del país y se tiene que promover que las empresas de servicios internacionales se asocien con compañías ecuatorianas para empujar al sector minero.

Sobre esto, el ministro Córdova dijo que se trabajará en una normativa que privilegia a las firmas ecuatorianas.

“La industria minera debe garantizar principalmente al Ecuador, no solo a través de recibir inversión o tributos, sino que los ecuatorianos encuentren trabajo allí y que además, sean las empresas nacionales las que desarrollen el trabajo” afirmó el funcionario Córdova.

Se espera una inversión de $ 1.000 millones para 2018
Haciendo un breve balance de 2017, el ministro del ramo aseveró que aparte de las 300 adjudicaciones mineras entregadas, que generarán un compromiso de inversión de unos $ 1.000 millones para los próximos cuatro años, se han consolidado dos de los proyectos más importantes para el país que son Fruta del Norte y Mirador, los cuales estarían próximos a iniciar con la producción en los siguientes dos años.

Por otra parte se cierra el año con una inversión de $ 600 millones y se espera que para 2018, la inversión alcance los  $ 1.000 millones.

“En 2018, el proyecto Río Blanco empezará a generar  producción; el proyecto Mirador ya dio inicio a las primeras pruebas para su producción, las mismas que veremos en 2019 y cerramos el año con reconocimientos internacionales que demuestran el interés que hay en el país”, apuntó. (I)