El trabajo será concluido a finales de 2015 y la capacidad máxima será de 110.000 barriles diarios
Los terrenos adjuntos a la refinería contenían desechos “peligrosos” (Infografía)
Por primera vez en su historia, desde ayer se paralizó totalmente el complejo petroquímico de Esmeraldas, ubicado en la provincia del mismo nombre, como parte del proceso de rehabilitación de la principal planta de refinación de crudo del país.
Durante la suspensión de 40 días de las actividades, según la estatal Petroecuador, se efectuarán el mantenimiento de los sistemas de agua de enfriamiento, el cambio de línea de aire, la renovación integral de la línea de tea, así como la independización de las dos unidades no catalíticas. La complejidad de estos sistemas operativos obliga a que su intervención se realice con la planta fuera de operaciones.
El esquema se basa en un plan de 11 proyectos que se ejecutan desde 2008 con paralizaciones progresivas, parciales y por etapas de las diferentes unidades que integran el complejo petroquímico.
La rehabilitación de la principal refinería del país estará lista a finales de 2015, año en que alcanzará la capacidad máxima de diseño de 110.000 barriles diarios de crudo. Los trabajos tienen como objetivo recuperar al 100% la capacidad operativa y de producción de la refinería. Al complejo ingresan para refinación 100 mil barriles de petróleo diarios.
El gerente de la Refinería de Esmeraldas, Carlos Pareja, confirmó que ayer se realizó la paralización del complejo, por tanto se dará un proceso de rehabilitación a los terrenos que están junto a la refinería, los cuales, “por un mal manejo de residuos del crudo afectaron los mismos, y se hace necesario recuperarlos”. “Cuando llegamos había un almacenamiento de tetraetilo de plomo, que es un químico muy peligroso y había otro desecho que se llama la sosa gastada y estaba mal almacenada”, dijo Pareja en entrevista con Teleamazonas.
Impacto por cierre de la refinería
La paralización obligará al Estado a realizar un mayor esfuerzo para importar combustibles que cubran el déficit, principalmente de gas licuado de petróleo (GLP), gasolinas extra y súper, y diésel premium e industrial, que en 2013 representaron una importación de 52,1 millones de barriles de esos combustibles.
“Lo que sucede con el cierre de la refinería es que el crudo que antes se refinaba ahora se exportará. Por otra parte hay que importar combustibles que antes se producían en la refinería, entonces aumentan las exportaciones de crudo y también las importaciones de derivados”, indicó el analista económico Walter Spurrier.
Explicó que en el balance, si el aumento de las importaciones es mayor que el de las exportaciones sí habrá un impacto fiscal. “No debería ser mayor el impacto porque al costo de las nuevas importaciones de combustibles hay que restar el beneficio de las exportaciones. Hace años se indicó que el proceso de rehabilitación costaría $400 millones”, dijo Spurrier.
Petroecuador, a través de un comunicado, aseguró que con las importaciones que han realizado oportunamente mantienen en stock el volumen suficiente de derivados del petróleo para garantizar el suministro en el mercado interno.
Crédito de Noble Americas
El 8 de septiembre de este año fue suscrito un contrato comercial entre Petroecuador y Noble Americas Corp. para la compra de productos refinados.
Noble Americas es una empresa de reconocido prestigio, que entre otras, realiza actividades de energía, agricultura, metales y minerales; desarrolla relaciones comerciales a través de contratos a largo plazo, suministro de productos derivados y logística. Noble mantiene participación activa en los procesos de Petroecuador, así como en la región.
“El contrato tiene una vigencia de 5 años, en los cuales Noble proveerá entre el 30% y 50% de la demanda de Diésel Premium y Nafta RON 93 de importación, y entre el 45% y 55% de la demanda de Nafta RON 87”, según Petroecuador.
La estatal resaltó que con esta operación comercial recibió un crédito de $1.000 millones, “en condiciones financieras muy favorables respecto a operaciones similares, y estos recursos servirán para financiar la ejecución del poliducto Pascuales (Cuenca), el sostenimiento de plantas de refinación y la rehabilitación de la refinería Esmeraldas. “Petroecuador recibió el crédito a 5 años plazo, y a una tasa de interés del 6%, de parte de Noble América”, afirmó la viceministra de Finanzas, Madelein Abarca.