Un agresivo plan de reconversión de cultivos será la clave para mejorar la economía entre los agricultores, en especial en las plantaciones bananeras poco productivas o que son constantemente afectadas por las inundaciones o plagas.

Este cambio de sembríos va acompañado de capacitación técnica por parte del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap) y de financiamiento por parte del Banco Nacional de Fomento (BNF).

En el caso de los cultivos  bananeros, se tomará la información del censo que realizan a las plantaciones, que permita establecer sus condiciones y realidad topográfica, expresó Carlos Vélez Crespo, coordinador zonal 5 del Magap. La medida no será “cambiar por cambiar, sino que los técnicos determinarán las condiciones del suelo y realizarán la propuesta”, explicó.

El viceministro de Agricultura, Luis Valverde Zúñiga, indicó que  incluso podrían existir cultivos aptos para el suelo, pero que en el invierno se inundan. En esos casos podría decidirse por terminar con los trabajos agrícolas en esas zonas y promover el cambio de sector donde se siembre. “Este es el caso que año a año se da con el sector arrocero en zonas bajas de la provincia de Los Ríos, en donde no deberían cultivar, pero lo hacen, con las conocidas consecuencias y los pesares que tienen que pasar los agricultores de esas localidades”, anotó.

Sobre el número de hectáreas para la reconversión, reiteró que la cifra no ha sido determinada, pero que los esfuerzos serán con base en informes técnicos y así reordenar la producción agrícola del país.

Julio Soto, pequeño agricultor de la zona del Guabo, provincia de El Oro, manifestó que respalda la iniciativa y que si esta es acompañada de asesoría técnica y el debido financiamiento, está dispuesto a acceder al programa. “Somos pequeños agricultores y tememos cambiar de lo seguro a lo inseguro”, aseguró el agricultor.

Reducción de plantaciones

El ministro de Agricultura, Javier Ponce Cevallos, en el caso del sector bananero, dio a conocer que las plantaciones entrarán en un proceso radical y muy intensivo de “reconversión productiva”.

Agregó que hay que reducir la extensión que está dedicada al cultivo del banano y profundizar la productividad.  Eso significa que deberán  salir del cultivo entre 15.000 y 20.000 hectáreas, y habrá que establecer técnicamente cuáles  saldrán y que puedan dedicarse a otras actividades. “Esto va estrechamente ligado a un control absolutamente radical, a un control de todas las siembras que se estén produciendo en estos momentos sin permiso”, dijo.

El secretario de la cartera aclaró que el Ministerio no está entregando permisos para ampliar la frontera agrícola ni las siembras de banano, por lo que, de ser necesario, se intervendrá en esas tierras y se harán procesos de expropiación.

Ponce mencionó que no puede ser que sobre la ley y aprovechando el bajo nivel de multas que existe en este marco legal, “se burlen los grandes productores y amplíen sus siembras. De manera que vamos a hacer un estricto control de las mismas”.

De su parte, el presidente Rafael Correa, señaló ayer  que existe una necesidad de reducir la cantidad de productores de banano y las hectáreas, en donde se cultiva esta fruta, puesto que en los últimos años se han registrado un exceso de producción y una pérdida de calidad.

Sector arrocero

Norberto Villa, productor de arroz  de  Ventanas, dijo que le gustaría cambiarse al cultivo de cacao. “Los agricultores de la zona retornan a la plantación de la ‘pepa de oro’, pero nosotros no tenemos recursos necesarios para incursionar”.

Reiteró que si hay créditos para  la reconversión, le gustaría que sean “muy blandos”,  porque de esa manera podrán pagarlos en el futuro. En el caso del cacao, la producción la obtienen en por lo menos los próximos 3 años.

Para los maiceros de la zona de Babahoyo, la reconversión de tierras no es la salida. “Necesitamos créditos para mejorar la producción y apoyo en la comercialización”, dijo Ricardo Tomalá.