La aprobación de la Ley de Fomento Productivo significará un despegue para las inversiones en el país, de eso está segura la ministra Eva García. Explicó los alcances  del proyecto de ley y aclaró algunas dudas que han surgido en los debates alrededor de la misma.

¿Cuál es la diferencia entre la Ley de Reactivación Económica y la nueva propuesta?
Esta tiene más beneficios, brinda más estabilidad y mejores plazos para la aplicación de los incentivos. Si antes el Copci (Código Orgánico de la Producción) brindaba incentivos por cinco años, ahora serán 10. Además los beneficios se amplían (a las inversiones) en Quito y Guayaquil.

¿Por qué se las incluye?
Esta reforma permite que los emprendimientos y las pequeñas empresas de las grandes ciudades puedan emprender con incentivos. Quito y Guayaquil son importantes porque significará dinamizar los centros comerciales. Aquí juegan un papel importante los Gobiernos Autónomos Descentralizados, que pueden dar incentivos para establecer nuevos negocios dentro de las ciudades.

Aparte de la exoneración del Impuesto a la Renta, ¿cómo se incentivará la inversión en zonas fronterizas?
La ley se articula con el Plan Nacional de Desarrollo en donde están las políticas de desarrollo fronterizo con 14 ejes temáticos. En la frontera norte por ejemplo, ya hay una política de seguridad y defensa que era el primer elemento que pedían los empresarios. También hay más de $ 46 millones en inversiones de los ministerios en esas zonas.

Los agricultores no se sienten totalmente atendidos en la ley
Ellos, como productores y proveedores de la industria, se benefician. A la producción hay que verla a través de encadenamientos. El proveedor de las materias primas venderá su producto a mejor precio a la industria que a su vez producirá más.
El productor agrícola tendrá un mayor mercado que es algo que ahora padece. Hay sobreproducción y no hay suficiente demanda.
Yo creo que con todos los incentivos que les estamos dando a las empresas, ahora tienen el compromiso de responder.

¿Cómo avanza la política agroindustrial?
En el Consejo Sectorial de la Producción hemos hablado de una reconversión productiva que tomará su tiempo, pero lo importante es iniciarla. Dejar de tener sobreproducciones para dedicarnos a producir productos ganadores y diversificar la canasta de exportaciones para que no haya una concentración de productos como hay ahora porque eso da una extrema sensibilidad ante los cambios internacionales.

Ante un panorama de austeridad, el sector de la economía popular y solidaria (EPS) teme perder participación en las compras públicas. ¿Cree que habrá un impacto fuerte?
El año pasado, las compras públicas sumaron más de $ 282 millones y pensamos que van a aumentar este año. No veo que vayan a tener afectaciones. La EPS ha sido muy favorecida: pueden deducir los gastos de capacitación y contarán con el fondo de garantías.

¿Por qué aún no han despegado las Zonas Especiales de Desarrollo Económico (ZEDE)?
El periodo que daba el Copci  era quizás muy corto. Los incentivos ahora se amplían de cinco a 10 años. Hay una empresa en la ZEDE de la Espol y este mes se aprueba la ZEDE de Quito. Ya está el Decreto Ejecutivo y el Consejo Sectorial de la Producción tiene que emitir su aprobación en estos días con un análisis previo del Ministerio de Finanzas.
Esta ZEDE significa más de $ 300 millones iniciales en inversión. Está ubicada en Tababela; tiene 23 proyectos de inversión identificados, ocho memorandos de entendimiento suscritos por firmas que desean instalarse. Dinamizará toda la cadena comercial y vivienda de la zona. (I)