Este año el dólar estadounidense ha marcado un máximo histórico en una serie de países de la región, principalmente en Colombia, Perú, Brasil, México y Chile.

Todos, excepto Argentina (por razones políticas, por la elección presidencial este mes) han devaluado sus monedas nacionales.

Entre los principales factores que han provocado una depreciación de las monedas nacionales se encuentran el derrumbe de los precios de las materias primas, el lento crecimiento de la economía en China  este año y la expectativa ante un posible aumento de la tasa de interés de parte de la Reserva Federal de Estados Unidos.

En el contexto del caos que reina en los mercados internacionales en un intento de mejorar el curso cambiario los gobiernos latinoamericanos pueden recurrir a una devaluación de las monedas nacionales, un escenario de acontecimientos que ya ha pasado con el yuan chino y el tenge kazajo.

El récord de caída frente al dólar en lo que va del año lo ha sufrido el real brasileño, que perdió el 31,7% de su valor hasta agosto de este año. Le sigue el peso colombiano con la pérdida del 30,6%. Ayer un dólar en Colombia se vendía a 3.068 pesos.

En el período comprendido entre agosto de 2014 y el mismo mes de este año la moneda colombiana tuvo una mayor devaluación que la brasileña, ya que en esta lista ocupa el primer lugar, con una depreciación del 36% frente al dólar, contra el 35% del real.

La caída de los precios del petróleo también afectó a México, donde en los primeros 8 meses de este año la moneda perdió el 19% con respecto al dólar.

Chile está experimentando problemas por la reducción de la demanda de las materias primas por parte de China.

El país latinoamericano exporta el 47% del cobre a Pekín. La disminución del ritmo del desarrollo del gigante asiático ha influido de manera negativa al coste de la divisa chilena, que desde enero perdió el 15% y esta semana marcó su precio mínimo en seis años.

El 2 de enero de 2015, un dólar estadounidense se cotizaba en 613,41 pesos chilenos. Ayer llegó a los 709,72 pesos chilenos.

Mientras que en Perú, el valor del nuevo sol llegó a su valor mínimo desde 2006 causando alarma entre los inversionistas. Ayer la moneda peruana se apreció 0,12% tranquilizando al sistema interbancario.

En este contexto, los países latinoamericanos que más sufrirán por el alza del dólar serán los orientados a la exportación de materias primas.

DATOS

Es una medida de política económica que consiste en disminuir el valor de una moneda respecto a otra u otras monedas extranjeras, con la finalidad de equilibrar la balanza de pagos.

El efecto de la devaluación representa un abaratamiento de las exportaciones y el incremento de los precios de las importaciones del país devaluador en términos de su propia moneda.

La depreciación de una moneda se produce por las diferentes expectativas entre los países, así como las distintas políticas macroeconómicas.

Los países tienden a intentar influir en los tipos de cambio como instrumento para ganar competitividad, ya que, al tener precios más bajos, esto ayuda a fomentar las exportaciones.Además, la depreciación de las divisas nacionales provocará una subida significativa de los precios de los productos importados.

El objetivo de las devaluaciones que se han dado en los países analizados es que por un dólar se puedan comprar más pesos colombianos, mexicanos, chilenos o soles peruanos y reales brasileños, con la finalidad de abaratar los productos que exportan y que se consumen en los países desarrollados.

Si bien la devaluación de una moneda es la respuesta inmediata de los Gobiernos para equilibrar la balanza, también tiene sus consecuencias. La inflación es sin duda el aspecto que más preocupa al ciudadano común, sobre todo la incidencia que puede tener sobre el encarecimiento de los bienes básicos.

El aumento en la tasa de cambio incrementa el precio de los bienes de consumo, así como las materias primas que emplean algunas empresas, lo que las obliga, en muchos casos, a trasladar ese aumento de precio al consumidor final.

Los pronósticos apuntan a que el dólar se siga apreciando, pero hay quienes opinan lo contrario. En una entrevista con la Radio Pública, el académico Juan Fernando Terán indicó que  los países asiáticos están en auge y esto será un problema para los norteamericanos. “Estados Unidos no está en alza, como cree la gente. Está en declive”, dijo.

Con respecto a las monedas del G10, los analistas apuntan a una depreciación continuada en 2016.

La firma Goldman Sachs ha recortado su estimación para la divisa de la Unión Europea, y el próximo año esta moneda comunitaria se cotizaría en 0,85 dólares.

Pero tal como apunta Terán, la situación sería favorable para los países asiáticos. Por ejemplo el martes se evidenció un alza en las bolsas de valores, la de Corea del Sur subió 1,4%, y las acciones de Asia y Pacífico fuera de Japón aumentaron 1,7%. (I)