El establecimiento de un salario digno, el derecho a la huelga, la seguridad social para las amas de casa, la elección de la dirigencia sindical por voto secreto y democrático y los límites en los salarios a los gerentes de las empresas son varias de las propuestas que constarían en el nuevo borrador del Código Orgánico del Trabajo, que enviará el Ejecutivo a la Asamblea Nacional, anunció ayer el ministro de Relaciones Laborales (MRL), Carlos Marx Carrasco.

El funcionario no adelantó la fecha en que serán enviados los textos a la Legislatura, los mismos que reemplazarían al borrador que se presentó el 1 de mayo en la ciudad de Esmeraldas. “La propuesta es revolucionaria desde su nombre, porque ya no será código de relaciones laborales sino de trabajo”, sostuvo el ministro Carrasco.

Acotó que en el nuevo borrador se hacen precisiones en su contenido y que no constaban en el proyecto que fuera elaborado por el exministro, Francisco Vacas.

“Se ratifica que los trabajadores ecuatorianos deben tener un salario digno, para lo cual se está determinando que ninguna empresa podrá declarar utilidades sino lo paga a los empleados, para lo cual se le permite a la empresa que eche mano del Impuesto a la Renta (IR) que debe pagarle al Estado”, aseguró Carrasco.

También se está proponiendo que la designación de la dirigencia sindical sea el resultante de la voluntad del universo de trabajadores, por voto universal y secreto.

Además el Código propondrá que el Consejo Nacional del Trabajo y las comisiones sectoriales debatan los mínimos y máximos sectoriales que se refieren a la alta gerencia, a fin de disminuir la brecha entre salarios altos y bajos.

“Así como la Junta Monetaria tiene la obligación de poner límite, techo a los salarios de los gerentes de los bancos, ahora decimos que la Superintendencia de Compañías pondrá estos límites en las compañías de su competencia. La Superintendencia de Economía Popular y Solidaria lo hará en su ámbito y la Superintendencia de Telecomunicaciones en donde le corresponda”, manifestó el titular del MRL.

Para poner fin a la vulneración de ciertos sectores se establece que los jóvenes tendrán acceso a un primer empleo a través de una regulación en el Código y por norma secundaria del Ministerio del Trabajo.

Con respecto al derecho a la huelga, esta podrá cumplirse al interior de la empresa, pero no en todas las instalaciones sino en un solo espacio en donde los trabajadores hagan efectivo su legítimo derecho al reclamo. La huelga no será remunerada.
En cuanto a los despidos intempestivos se plantea que cuando se deba a actos discriminatorios, como ser sindicalista, mujer, discapacitado, afro, joven, o tener otras preferencias sexuales, el juez podrá declararlos nulos.

Para el establecimiento de los salarios se deberá, obligatoriamente, tomar en cuenta la inflación, la productividad y la equidad. “Si la inflación de un año en concreto es del 5%, el primer parámetro para mejorar el salario es este”.

Las mujeres y los grupos vulnerables merecen especial atención en el Código, se extiende a un año el permiso para lactancia, que actualmente es de 9 meses, y con la posibilidad de que después de los seis meses el esposo o pareja pueda tener dos horas para el cuidado del niño o niña. La empresa está en la obligación de darle las dos horas que serán remuneradas.

La normativa legal abre las puertas para la universalización de la seguridad social, en donde se incluye a las amas de casa y a los trabajadores autónomos.

“La marcha será pacífica”

El presidente de la Confederación Ecuatoriana de Organizaciones Clasistas Unitarias de Trabajadores (Cedocut),Mesías Tatamuez, así como el titular del Frente Unitario de Trabajadores (FUT), Édgar Sarango, ratificaron su decisión de movilizarse el 17 de septiembre en contra de la propuesta de Código de iniciativa del Ejecutivo.

Los dirigentes criticaron la decisión del Gobierno de llevar adelante una propuesta que según ellos no ha sido consultada y violentaría algunos derechos que han sido fruto de la lucha sindical en el país.

Tatamuez dijo que la propuesta es regresiva, atentatoria a los derechos del trabajador ecuatoriano, por lo que la marcha es para pedir que se tome en cuenta el proyecto que ellos presentaron en 2012 que recoge el sentir del sector. Aclaró que “la marcha será pacífica y que de ninguna manera se busca desestabilizar al Gobierno”.

De su parte, Carlos Marx Carrasco enfatizó que detrás de estos grupos sindicalistas e indígenas “hay actores ocultos, que quieren desestabilizar al Gobierno y la democracia”. “El primer borrador del Código, motivo por el cual se prepara la marcha nacional de algunos trabajadores, ya no existe”, subrayó.