2012 fue el primer año sin fiebre aftosa en la región
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) anunció ayer que 2012 fue el primer año en el que no se registraron brotes de fiebre aftosa en la ganadería de los países de la región andina, desde su llegada a esa zona hace más de medio siglo.
"Se trata de un gran hito para el proceso de erradicación y una gran noticia para la seguridad alimentaria de dichos países", explicó el oficial principal de Desarrollo Pecuario de la FAO, Tito Díaz, según un comunicado difundido por la oficina regional del organismo en Santiago de Chile.
Esto contrasta con lo ocurrido entre 2009 y 2010, cuando se registró una de las etapas epidémicas más fuertes en la región.
En cambio, en 2011 solo hubo cinco focos en Ecuador y dos en Venezuela, y en 2012 Perú completó más de ocho años libre de la enfermedad; Bolivia seis, y Colombia cuatro; mientras que en Chile no se registran brotes desde 1981.
Según el Proyecto Regional Integrado para el Control Progresivo de la Fiebre Aftosa, liderado por la FAO, esta situación evidencia que la presencia de la enfermedad ha dejado de ser endémica para convertirse en esporádica.
Según Díaz, la vacunación seguirá siendo una herramienta de gestión, pero ahora es necesario efectuar una combinación de vigilancia específica y de vacunación estratégica para interrumpir la transmisión de la infección.
Esta enfermedad animal viral es altamente contagiosa y puede provocar fiebre al ganado, disminución en la producción de leche e incluso la muerte. "Para garantizar la seguridad alimentaria de la región andina, la erradicación de la fiebre aftosa debe ser una prioridad en Ecuador y Venezuela, países donde aún se presenta esporádicamente, y evitar su reintroducción a las zonas libres de Perú, Bolivia y Colombia", explicó Díaz.
En el año, la Agencia Ecuatoriana de Aseguramiento de la Calidad del Agro (Agrocalidad) ejecuta dos fases de vacunación contra la fiebre aftosa: la primera en los meses de mayo y junio, y la segunda en noviembre y diciembre, ambas duran 45 días ininterrumpidos en el territorio nacional.