La hinchada celebró en calma el triunfo de los ‘azulgranas’
Los 10 mil aficionados que llegaron al estadio Atahualpa alentaron a Deportivo Quito sin causar desmanes en el cotejo que el local ganó 1-0 al Botafogo de Brasil en la primera fase de la Copa Libertadores.
Con una preferencia copada, los hinchas ‘chullas’ recibieron a sus jugadores con cintas de papel blanco que llegaron hasta la pista atlética del escenario deportivo capitalino.
Ningún objeto fue arrojado al terreno de juego durante el encuentro, el primero de un torneo internacional que se disputa sin mallas en el ‘Coloso de El Batán’. Alrededor de los graderíos, cerca de 40 policías custodiaban el escenario.
Con trompetas, banderas y paraguas, los cánticos del cuadro de la ‘Plaza del Teatro’ fueron entonados por los miembros de la barra ‘Mafia Azulgrana’, que respetó las normas de seguridad, dejó libres las gradas de salida y no ingresó a la cancha.
El gol del ecuatoriano Víctor Estupiñán, a los 19 minutos, fue festejado por los aficionados que con el tradicional “Dale y dale y dale Quito dale”, mostraron su apoyo al equipo que desea integrar el Grupo 2 que lo completan Unión Española de Chile, San Lorenzo de Argentina y el ecuatoriano Independiente.
Tras la anotación, el compromiso se apagó. El volante ofensivo Carlos Feraud junto al atacante Walter Calderón, fueron los jugadores locales más influyentes, pero poco pudieron hacer ante la ordenada zaga del elenco ‘carioca’, que se animó a atacar al portero Rolando Ramírez.
En el costado norte de la tribuna y en la general sur, 250 aficionados del ‘Fogão’ alentaron, pero al igual que la hinchada local, no incurrieron en actos de violencia y el compromiso se desarrolló con tranquilidad.
Con la mínima ventaja, la escuadra dirigida por el técnico ecuatoriano Juan Carlos Garay viajará a Río de Janeiro para el encuentro de vuelta, que se disputará el 5 de febrero en el estadio Maracaná.