Quincy Promes, jugador del Spartak de Moscú, está bajo la lupa de la justicia. El jugador estaría implicado en un caso de tráfico de droga.

Según medios internacionales, la Fiscalía de Países Bajos pidió nueve años de prisión para el jugador, que formó parte de su selección entre 2014 y 2021. Eso por su presunta implicación en un caso de tráfico de cocaína desde Brasil hasta Bélgica en enero de 2020.

La Fiscalía acuso al jugador, y otro sospechoso de 32 años de edad, de “importar, exportar, transportar y poseer 1.362,9 kilos de cocaína oculta en un cargamento de sal marina procedente de Brasil”.

El otro acusado, identificado como Marylio V., podría ir a prisión durante ocho años y además, deberá pagar una multa de 10.000 euros.

El portal Infobae reporta que el Equipo de Inteligencia Criminal (TCI) de la Policía de Países bajos recibió una alerta de la supuesta actividad ilícita en la que estaría involucrado el jugador.

La Fiscalía señaló: “Se colocó un equipo de escucha en el coche del sospechoso y se le vigiló. La veracidad de la información de TCI fue confirmada, en parte, por los teléfonos incautados a otras personas en los que se encontraron conversaciones en las que participaban los sospechosos. Muchos mensajes de chat dejaron claro que ambos estaban involucrados en la entrada, retirada, transporte y venta de estos dos envíos”.

Esta semana hubo una audiencia a la que el jugador no asistió. Su abogado, Robert Malewicz, dijo que el jugador no pudo acudir porque “tenía otras obligaciones”.

Según fuentes citadas por Infobae, el jugador tendría reparo de que sea detenido cuando llegue a su país.