“Con relación a Europa estamos a un 75% más”
Su cercanía con la naturaleza de la región oriental y sobre todo de la ciudad del Tena (Napo), donde nació hace 26 años, lo llevó a vincularse al rafting desde hace una década. Hoy Gregorio Andy es todo un experto en ríos y especialista en este deporte extremo. Participó junto a su equipo Limoncocha en el mundial de Corea del Sur en 2007. Por falta de apoyo no pudieron asistir a las citas ecuménicas en Rusia y Costa Rica.
Es además el monarca vigente, con su equipo, del Campeonato Nacional de Rafting que por segundo año consecutivo se desarrolló en el río Quijos, sector de Baeza (Napo), en el último feriado.
Ahí ganó junto a su grupo 2 mil dólares para implementos. Andy es guía turístico, habla inglés y forma parte de la compañía “River People”. FANÁTICO conversó con el deportista oriental previo a la prueba.
¿Qué es lo más difícil de aprender en el rafting?
Quizás la técnica que se requiere para dominar el remo, sostenerlo y utilizarlo con rapidez en las corrientes durante las competencias para ir al mismo ritmo de todos los compañeros. Se requiere cierta habilidad y fuerza para manejarlo dentro del agua, sobre todo cuando se va contra corriente, como a veces sucede. Además, es indispensable perder el miedo al agua, que se logra con el paso de los años.
¿Qué región en Ecuador es la ideal para este deporte?
El Oriente ecuatoriano, porque tiene mayor cantidad de ríos y cada uno con varios segmentos para practicar el rafting desde su nivel inicial hasta uno más profesional. Incluso, hay cascadas de nivel 6 para los kayakistas. Además, su flora y fauna lo hacen atractivo incluso para descansar.
¿Una persona puede vivir de la práctica del rafting?
En Ecuador es imposible, por lo costoso que es ser deportista extremo. Cada implemento de buena calidad supera tranquilamente los 300 dólares y apenas dura dos años. Además, hay muy pocas competencias con premios que no superan los 2 mil dólares, y eso hay que reinvertirlo en equipos. Entonces, no queda nada para la alimentación y menos para las demás actividades que cualquier persona necesita a diario.
Con esos inconvenientes, ¿cuál es el nivel del rafting ecuatoriano?
Pese a todas esas dificultades la categoría de este deporte es bastante buena. Se diría que estamos en un 75% en relación con los otros países, sobre todo de Europa y Estados Unidos. Hemos clasificado a eventos internacionales, pero lastimosamente por los elevados costos que representa ir a otros países no hemos podido acudir.
Un viaje representa más de 60 mil dólares, aunque se tenga patrocinador no se puede cubrir en su totalidad. El auspiciante ayuda más en eventos nacionales con hospedaje, comida y transporte. Pero ahora sabemos que podemos recurrir al Ministerio del Deporte, ojalá podamos ahí tener más respaldo al ser los campeones.
¿Por qué un tour con rafting cuesta más en Oriente?
La razón es muy simple. Nosotros (“River People”) damos todas las seguridades ante cualquier accidente. En el bote no van más allá de 8 personas. Si el grupo familiar supera ese número, se le da otro bote con guía experto en primeros auxilios y conocedor total de los ríos, kayakista; además del sistema GPS, que facilita la localización en cualquier punto, si es necesario por vía aérea con helicóptero o terrestre con una ambulancia. En otros lugares no hay esa seguridad y por eso los precios son menores. Además, nuestros recorridos son al menos de un día y no solo de horas. (VNH)