Un equipo de científicos surcoreanos impulsa el uso de parches inteligentes como una opción para controlar la glucosa en el torrente sanguíneo de una forma menos invasiva.

El más reciente modelo de parche inteligente incorpora un monitor flexible y ligero que se adhiere a la piel y se puede llevar con comodidad.

La mayor ventaja es que conserva su sensibilidad original luego de múltiples usos, lo que permite utilizarlo repetidas veces a lo largo del tiempo, según lo advierte la revista Computer Hoy.

Esta herramienta también está diseñada para administrar un fármaco antidiabético por vía intravenosa, por medio de microagujas. Para ello, cuenta con un sensor de temperatura que es el encargado de hacer que las microagujas liberen el medicamento.

Según Kim Dae-Hyeong, uno de los miembros de la investigación, gracias a los nanomateriales es posible fabricar dispositivos que proporcionan nuevas oportunidades para el tratamiento de enfermedades crónicas como la diabetes. Las aplicaciones potenciales del grafeno le valieron el Premio Nobel de Física en 2010.

Sus atributos lo convierten en un material muy prometedor, desde el punto de vista científico.

Es flexible, transparente, muy delgado y conduce la electricidad. El mayor problema es que hasta ahora su aplicación en la detección de marcadores biológicos había sido muy limitada. El equipo de investigadores de la Universidad de Seúl (Corea del Sur) ha conseguido sintetizar el grafeno con un método conocido como deposición química de vapor, uno de los procesos químicos para obtener el material.

Al mismo tiempo, le añadieron partículas de oro que combinado con una doble malla dorada, mejoró la actividad electroquímica de los sensores de pH, humedad y temperatura que corrigen en tiempo real la detección de los niveles de glucosa en sangre.

El parche contiene también un sistema de administración de fármacos que responde al calor hecho de pequeñas agujas que liberan metformina, un fármaco utilizado en el tratamiento oral de la diabetes tipo 2.

La diabetes es una preocupación de salud pública. La Organización Mundial de la Salud (OMS) la considera “una epidemia mundial” asociada al aumento del sobrepeso, la obesidad y el sedentarismo.

La diabetes tipo 2 representa hoy en día el 90% de los casos mundiales de esta enfermedad.