La noche de ayer fue de fiesta, con música de los ecuatorianos Bocapelo y Mariela Condo y la agrupación chilena Inti Illimani, en primer lugar para conmemorar el Día Nacional de la Cultura -celebrado en honor a la fecha de creación de la Casa de la Cultura Ecuatoriana, el 9 de agosto de 1944, por el lojano Manuel Benjamín Carrión Mora- y en segundo para “agasajar” a los ganadores del Premio Nacional Eugenio Espejo -establecido en 1975, cuando se declaró también al 9 de agosto como “Día de la Cultura Nacional”-, quienes habían sido condecorados a las 12:00, en el Palacio de Carondelet.

El honor recayó en el escritor Abdón Ubidia, el saxofonista Luis Silva Parra y la bióloga Eugenia del Pino, cada quien en una categoría distinta del galardón.

Ubidia ganó en literatura y ayer, al tomar la palabra en el Salón Amarillo de la Presidencia, celebró la decisión del Gobierno de mantener el Premio Nacional Eugenio Espejo que ante todo tiene un carácter humanista, pues se rumoraba que sería eliminado desde este año.

Incluso el Consejo Nacional de Cultura, encargado de presentar las ternas -para cinco categorías diferentes- de las que el Presidente de la República escoge a los ganadores, no hizo la difusión masiva como en 2010 y 2011 (para que la sociedad civil y las instituciones culturales hagan sus nominaciones). Por el contrario, el proceso fue reservado y poco apreciado por los medios de comunicación.

El presidente Rafael Correa fue el encargado de entregar las medallas y  diplomas (dos de los tres elementos de los que se compone el reconocimiento nacional) a quienes este año -y durante una dilatada trayectoria- han sobresalido por sus creaciones y aportes significativos en distintos ámbitos culturales.

En su discurso, el Primer Mandatario destacó que la imagen de Eugenio Espejo se mantiene incólume en la memoria del pueblo, además de que aquel patriota creía firmemente en que la verdadera liberación es el futuro sin miseria ya que fue la primera voz del pensamiento ecuatoriano y libertario, buscando sociedades más justas.

En todo momento lo escucharon con atención Ubidia, Luis Silva Parra -reconocido en actividades culturales y artísticas- y Eugenia del Pino -galardonada en actividades científicas-, además de la ministra de Cultura, Érika Sylva Charvet.

La Ministra en su intervención destacó que el Premio Nacional Eugenio Espejo es un justo homenaje para quienes desarrollan obras trascendentales para el país: “Luis Eduardo Silva Parra es un ícono de la música popular, Abdón Ubidia es el más alto representante de la narrativa de su generación y el trabajo de María Eugenia del Pino en las actividades científicas es invaluable para el país”.

La tercera parte del reconocimiento que obtienen Ubidia, Silva Parra y del Pino es una bonificación de $ 10.000 y una pensión vitalicia mensual de cinco salarios mínimos unificados ($ 1.470).

Quienes los antecedieron en sus respectivas categorías, en 2011, fueron en actividades culturales, Guillermo Ayoví Erazo, conocido artísticamente como Papá Roncón, de una terna integrada, además, por las señoras  Eudoxia Estrella Ordóñez y Noralma Vera Arrata; en actividades literarias, Rafael Díaz Ycaza, de una terna compuesta por el doctor Jorge Dávila Vásquez y el actual ganador Abdón Ubidia, y en actividades científicas, el doctor José Amén-Palma, de una terna que además estuvo conformada por los doctores Alfredo Costales Samaniego y Edgar Samaniego Rojas.

Ayer, una vez concluida una emotiva ceremonia de condecoración donde no faltaron la multiplicidad de felicitaciones y aplausos por cada uno de los premiados, en el Twitter oficial de la Presidencia de la República se difundió la felicitación de Rafael Correa: “a todos los galardonados con los Premios Eugenio Espejo, la Patria les agradece su vida, su creación y su obra”.

A Abdón Ubidia la crítica literaria lo reconoce favorablemente aparte de por su obra narrativa, por su trabajo con temas relacionados con la literatura oral y su perenne vinculación al trabajo intelectual, ya que ha participado en múltiples simposios y seminarios a nivel internacional.

Luis Silva Parra tiene una extensa trayectoria como saxofonista y arreglista, además dirige la Academia Musical Preludio. Eugenia del Pino tiene una amplia trayectoria en la investigación del desarrollo de las ranas ecuatorianas.