A medida que las posibilidades de consumir cultura se amplían en un mundo copado de plataformas para hacerlo, la experiencia teatral, como se le pronostica a cualquier método analógico, podría pensarse relegada.

Los últimos años en Ecuador han demostrado lo contrario. La proliferación de modos de hacer teatro crecen y el público, al parecer, se niega a abandonar esa experiencia de estar frente a los actores, siendo todo cuanto podrían ser en una historia que cuenta sus modos de representar el mundo.

Este martes, en el Día Mundial del Teatro, en el que se han generado nuevas plataformas para mirar una interpretación muy breve o larga en el país, varios gestores piensan sus modos de construir desde las tablas, desde los dramas humanos que siguen siendo los mismos que pensó Shakespeare.

“La tradición del teatro es horizontal. No hay quién pueda afirmar que el teatro está en algún centro del mundo, en alguna ciudad o edificio privilegiado. El teatro, como yo lo he recibido, se extiende por una geografía invisible que mezcla las vidas de quienes lo hacen y la artesanía teatral en un mismo gesto unificador”, dice en su mensaje del Día Mundial del Teatro el cubano Carlos Celdrán.

En el Día Internacional del Teatro, la Dirección de Cultura de la Universidad de Guayaquil entregará un reconocimiento al trabajo de Teatro Arawa y a su director Juan Coba. Se trata de una petición de quienes pasaron por las filas de los talleres que desde sus inicios plantea el grupo.

Para Juan Coba, director y fundador de Arawa, trabajar en talleres de teatro con estudiantes, que en muchos de los casos no están interesados en hacer de la actuación su profesión central, es contribuir en que haya personas que tengan “una visión más amplia del mundo que les rodea”.

Para Coba “esta forma de lectura del mundo les hace tener otra sensibilidad como seres sociales, al juntarse con los demás, relacionarse de otra forma, ser más sensibles para buscar el mundo ideal, vivir en una comunidad donde todo sea justo y equitativo”.

Después de este homenaje, Arawa abre su casa, en una pequeña sala de la Casona Universitaria, al sur de la ciudad, para celebrar este día de lo sensible, desde las 19:00 y continúa mañana.

En Quito, la Asociación Nacional de Artes Escénicas homenajeará a Fernando Moncayo y Claudia Monsalve, actores del colectivo La Rana Sabia Títeres; a Pedro Oscar Pérez Larraín y Milton Araujo.

Este homenaje se enfoca en la trayectoria de actores que durante sus años de trabajo han encontrado en el quehacer teatral una manera de llegar a distintos públicos con historias a modos de fábula.

La Rana Sabia, agrupación fundada por Moncayo y Monsalve trabaja desde 1973 con títeres. (I)