Hoy y mañana, en el sánchez aguilar, se realizan las últimas funciones de la obra a las 20:30
Teatro del Cielo presenta La Espera y edifica un cuerpo pensante (Galería)
Hace un mes el Teatro del Cielo regresó del Festival Internacional MimeFest. Este evento se realiza en dos ciudades de la República Checa hace 3 años. Su foco de acción es la pantomima.
Los 7 integrantes de la agrupación que viajaron a representar no solo a Ecuador, sino también a América Latina, recibieron aplausos de pie durante 8 minutos en un teatro de más de 1.000 espectadores. El público de ese país quedó impactado con la presentación de las 7 piezas clásicas de la técnica del mimo corporal dramático que incluye la obra ‘El gran viaje’. Dichos movimientos de la escuela del actor y mimo francés Ettiene Decroux tenían el toque del director de Teatro del Cielo, Martín Peña.
En su regreso a Ecuador, Teatro del Cielo vuelve a los escenarios con la presentación de ‘La Espera’, hoy a las 20:00 y mañana a las 19:30 en el Teatro Sánchez Aguilar. Esta vez los 15 actores que integran la agrupación muestran la obra dirigida y pensada por Martín Peña.
Vuelven a poner en escena la técnica del mimo corporal dramático, una forma de hacer teatro a la que consideran el futuro de este arte, pues marca distancia con el cine y la televisión.
En esta obra no hay un guión, la representación de los defectos de las sociedades son a través de una familia que es núcleo y esencia, como cada uno de sus personajes. Los diálogos son breves y neutrales. Está hecha a partir de imágenes. Cada movimiento de los actores responde a un encuadre que ha sido trabajado de acuerdo al cuerpo de sus intérpretes.
“Quizá si la obra estuviera escrita no sería tan interesante porque todo está en la ejecución”, resalta el director.
El lenguaje de la obra no es realista. El uso del cuerpo lleva a las situaciones a sus extremos, a su simbolismo. Es todo muy estilizado, con el objetivo de indagar en la esencia de los seres humanos y ponerlo en el escenario.
Las características de ‘La Espera’ son parte del todo al que intenta llegar esta agrupación: promover y difundir la técnica del mimo corporal dramático.
Para la actriz Yanet Gómez, esta es la técnica que menos se usa a pesar de que, considera, es la más atractiva de ver.
El mimo corporal dramático segmenta y divide el cuerpo del actor hasta que el intérprete pueda conocerlo y adaptarlo a los personajes.
“Es un lenguaje completamente artificial, la forma del movimiento se hace orgánica. Es lo mismo que cuando un músico aprende a hacer música. Se centra en la técnica y posteriormente se incorpora al cuerpo”, explica Gómez.
Para el director de Teatro del Cielo, “el cuerpo puede expresar cosas que van más allá de las palabras.Estudiamos una forma del cuerpo, un lenguaje corporal que lo hace como esas químicas negativas entre personas, que de pronto en las palabras parecen cordiales, pero en el cuerpo es posible representar las fricciones que existen en estas relaciones”, explica.
Para concretar las posibilidades que tiene el cuerpo en el escenario trabajan una rutina de entrenamiento muy fuerte.
Esta inicia con una preparación física. Posteriormente tiene una preparación técnica, en la cual manipulan la articulación sobre todo del tronco del cuerpo para que tengan control de la expresión.
“Con esto el actor puede darle cualquier forma a sus movimientos”, explica Peña.
El cuerpo se estudia de forma técnica para pasar a lo que llaman ‘líneas poéticas’.
Con esto ponen la técnica, que es cuadrada, en el plano de una situación dramática con el objetivo de construir un cuerpo pensante.