El diario argentino El Clarín confirmó este viernes la muerte del escritor Ricardo Piglia (Adrogué, Buenos Aires, 1941). El autor fue diagnosticado de esclerosis lateral amiotrófica en 2014. Desde entonces, se aferró a la publicación de lo que llamó 'una autobiografía futura', una trilogía que tuvo que dictar, impedido de escribirla con sus propias manos.

Piglia es considerado un clásico de la literatura argentina actual. Entre sus novelas más destacadas se encuentran: Respiración artificial, Ciudad ausente, Plata quemada y Blanco nocturno.

Es ganador del Premio Planeta Argentina (1997), Premio Iberoamericano de Letras José Donoso (Chile, 2005), Premio Rómulo Gallegos (Venezuela, 2011) y del Premio Formentor de las Letras, que entrega la editorial Seix Barrial. Cuando recibió el Rómulo Gallegos por su novela Blanco Nocturno, convirtiéndose en el tercer argentino que consigue esta prestigiosa distinción, el jurado dijo que logró el premio por “el valor estético, el compromiso literario, la universalidad y la fuerte personalidad” de la obra .

A la par de su trabajo de ficción ha desarrollado una labor de crítico y ensayista, publicando textos entre los que destacan: Formas breves, Diccionario de la novela de Macedonio Fernández y El último lector.

Como guionista cinematográfico ha escrito Corazón iluminado de Héctor Babenco; La sonámbula, recuerdos del futuro de Fernando Spiner y El astillero de David Lipszyc, basada en la novela homónima de Juan Carlos Onetti.

Su novela Plata quemada, llevada a la pantalla grande por Marcelo Figueras, obtuvo en España el Premio Goya 2000, al mejor largometraje extranjero de habla hispana.

El trabajo de este escritor y académico se sitúa por encima del proceso de desliteraturización que padece la novelística actual y vuelca en el pozo de un ferviente lector la mirada de un crítico literario perspicaz y el conocimiento de un teórico de la literatura. (I)