“Es preciso tener todavía caos dentro de sí para poder dar a luz una estrella danzarina, dijo Federico Nietzsche. Nosotros hemos pasado por el caos y ahora vamos por esa estrella danzarina...”. Este fue el símil que usó el nuevo presidente de la CCE, el escritor Raúl Pérez Torres, la noche del pasado jueves cuando asumió el cargo.

Pérez Torres llegó a la presidencia después de que interpusiera una acción de protección en un juzgado para defender la victoria que consiguió en las elecciones del 1 de agosto, pero que la junta plenaria quería cambiar con nuevas elecciones en dos provincias.  

El Teatro de la Casa de la Cultura, en donde se realizó la sesión solemne en la que Pérez Torres y Gabriel Cisneros asumieron la presidencia y vicepresidencia, acogió a más de 1.000 invitados que aplaudieron, abuchearon y disfrutaron de la presencia de algunos grupos artísticos que colaboraron esa tarde y noche con el nuevo titular de la entidad.

La apertura estuvo marcada por la presentación de un vídeo en el que aparecieron músicos, actores, miembros de la CCE y niños. Todos con un solo discurso recordaban la “buena” gestión de Pérez Torres del año 2000 al  2004.

Las ministras de Cultura Érika Sylva, y de Patrimonio, María Fernanda Espinosa, participaron de la ceremonia y fueron, junto a Pérez Torres, las más aplaudidas. 

Sylva hizo un llamado al presidente de la CCE así como a los representantes de los núcleos para trabajar de forma mancomunada en proyectos nacionales estratégicos.

Para Sylva los temas que deben convocarlos son: la creación del sistema de formación artística, el sistema nacional de cultura y el desarrollo de una potente industria cultural nacional.

Espinosa, por su parte, pidió cambios urgentes y dramáticos dentro de la Casa. “No es posible que del presupuesto anual (que recibe la CCE) el 86% esté destinado al gasto corriente y apenas un 14% a la inversión y creación de actividades culturales”, dijo mientras el auditorio no dejaba de aplaudir.

La ministra, en su discurso, dejó entrever las inequidades que existen dentro de los núcleos provinciales de la CCE. “Hay determinados núcleos de la CCE que reciben apenas recursos para subsanar su gasto corriente y deben autogestionarse  para sus actividades culturales, eso debe cambiar de manera dramática”, insistió Espinosa.

Por su parte, el nuevo presidente de la CCE dijo que desde este gobierno se está defendiendo la soberanía y se lucha contra el neoliberalismo y el neocolonialismo.

El escritor arremetió contra Mario Vargas Llosa, a quien calificó de “extremista” y “muerto para la vida”. A criterio de  Pérez Torres, sus escritos “disparatados” contra Assange y contra el presidente Correa lo llevan a esa calificación.

El autor, que rescató el pensamiento de Fidel Castro, Pepe Mujica, Mahatma Gandhi, Federico Nietzsche, dijo que su política será democratizar la Casa de Carrión y rejuvenecerla. Sobre el proyecto de Ley de Cultura  manifestó que  hay muchos errores de fondo y forma y que junto a los asambleístas se trabajará en una ley digna. 

Los abucheos quedaron para el ex candidato Marcelo Valdospinos, que fue nombrado por el presidente encargado Alberto Santoro. “Declinó su candidatura y esa postura llevó a designar a Pérez Torres como presidente”, señaló Santoro al momento de notificar la victoria del autor.