¿Cómo elaborar un presupuesto para el cuidado de nuestras mascotas?
El presupuesto para mantener a una mascota es clave para garantizar su bienestar. Lo importante es planificar las finanzas de la familia incluyendo los rubros de alimentación, salud, higiene y atención veterinaria.
Para Elizabeth Arellano, ejecutiva del programa de Educación Financiera de Produbanco "Aprende", si no hay conciencia en relación al compromiso que se adquiere con el nuevo miembro de la familia, entonces ningún valor económico será suficiente.
"El amor que se recibe de una mascota debe ser retribuido con el cuidado y atención debidos, lo cual se logra con una planificación adecuada", apunta la experta.
Arellano señala que antes de llevar a una mascota al hogar hay que analizar las condiciones de la vivienda (propia, arrendada y con espacios abiertos), número de habitantes, y si alguien se queda en casa para cuidar al animalito.
Pero otro factor importante es conocer a fondo las características del perro, gato o animal que se elija: raza, tamaño y su situación actual de salud.
Establecer un presupuesto
La familia debe conocer cuáles son sus ingresos mensuales y cuánto destina a cada rubro, incluyendo un valor para cubrir lo necesario para los gastos de la mascota.
Una opción para elaborar un presupuesto adecuado es acudir a una clínica veterinaria y consultar con el médico aspectos importantes: tipo y cantidad adecuada de alimento; calendario de vacunas; dosis de desparasitación y la periodicidad de citas médicas. Con estos datos se podrá realizar un cálculo de los costos básicos que serán gastos fijos.
Otro punto a considerar en el presupuesto es si el animal necesitará alguna medicación constante, ya que será un gasto del que no se podrá prescindir.
Posteriormente, se añadirán aquellos gastos que no son necesarios pero que, de acuerdo a las posibilidades de cada hogar, se pueden incluir en el presupuesto.
Paso por paso
En el caso de la alimentación hay que tomar en cuenta el tamaño de la mascota, la edad y la comida recomendada por el veterinario. Un perro pequeño puede pesar entre 5-10 kilos; los medianos entre 10-15 kilos; y los grandes entre 15-90 kilos, según datos de la Asociación para la Prevención de la Obesidad de las Mascotas. Esta variable también depende del tipo de comida que se haya elegido: comida seca, enlatada, liofilizada o casera.
En el caso de los gatos, uno doméstico regular puede pesar entre 3 a 5 kilos. Los especialistas sugieren hasta 200 gramos repartidos en dos raciones diarias para su alimentación.
Un estudio difundido por la Sociedad Americana para la Prevención de la Crueldad con los Animales (ASPCA) recalca que los dueños de mascotas no solo deberían impedir que sus animales no engorden por razones afectivas y morales, también hay un motivo económico a tener en cuenta.
De acuerdo con el estudio, los dueños de perros con sobrepeso gastan el 17 % más en atención veterinaria y el 25 % más en medicación que los de animales que están en forma. En el caso de los gatos, los gastos se incrementan el 36 %.
En cifras absolutas, son $2.026 más por año en el caso de perros y $1.178 más en el caso de los gatos.
En el mercado nacional existen varias clases de comida y marcas con distintos precios que se pueden ajustar al presupuesto. Pero es importante consultar al veterinario si es la opción adecuada. Hay que recordar que una comida balanceada, con los nutrientes necesarios, aunque sea un poco más cara, evita gastos a futuro en enfermedades que deriven de la mala alimentación.
Mariuxi Moreta vive en Guayaquil y tiene cinco gatos. Ella gasta alrededor de $ 34 mensuales en una funda de 18 kilos de balanceado. Explica que al ser cliente frecuente del lugar en donde adquiere este producto ha logrado una rebaja de $4 mensuales. Adicional, adquiere unos $ 8 en hígados de pollo para complementar la alimentación que requieren sus mascotas.
María Auxiliadora Castillo vive en Quito y es dueña de dos perros cocker spaniel: Nicolás y Horacio. Son padre e hijo. Tienen 14 y 9 años, respectivamente. Dice que al mes gasta $ 10 en sus mascotas, que le alcanzan para comprar 4 kilos de balanceado y, para evitar que se aburran, alterna con sabor de pollo y de carne.
Ella asegura que le resulta más conveniente comprar en paquetes familiares. Cuenta que en las tiendas de su casa, al norte de la capital, se vende cada libra a $ 0.85, en cambio por el paquete grande paga $ 6.
Su presupuesto mensual le alcanza además para comprar 12 paquetes de barras de arroz que son ideales para limpiar los dientes y encías de los canes. Comen seis antes dormir.
"A mis perros les encanta ese producto y no me sale muy caro. En los supermercados hay promociones. Si compro más de 5 unidades, me rebajan un 5%", comenta.
Sus mascotas se alimentan también con bofe (vísceras) y arroz. A la hora del almuerzo consumen una pequeña porción. Por ello compra las carnitas en el mercado de La Ofelia; las 5 libras cuestan $ 3, lo que le alcanza para dos semanas.
Ahorrar es posible
El principal punto para ahorrar en el cuidado de las mascotas es tener las vacunas al día y realizar los chequeos médicos rutinarios (al menos una vez al mes). De esta manera se mantendrá sano y no se necesitará realizar ningún desembolso fuera del presupuesto en temas de salud, salvo ciertas excepciones.
Los precios de las consultas médicas varían dependiendo de la clínica veterinaria. Pero es posible encontrarlas desde los $10 y en $15 si se incluye la desparasitación. Hay incluso centros que ofrecen planes preventivos. Es el caso de Dr. Pet, en Guayaquil, con su plan "Consentido Protegido"de un año. Incluye varios exámenes y vacunas por un número determinado. El costo es de $ 199 y se puede usar un cupón para otra mascota que no fuera el titular.
Para que no le salga muy cara la cuota de vacunas semestrales, María Auxiliadora Castillo explica que aprovecha los combos. "Vacunar a las mascotas puede salir más costoso si se lo hace aparte. Es mejor aprovechar con un baño porque el veterinario puede hacer rebajitas", comenta.
En este punto entran, además, las esterilizaciones. Estas evitan que las mascotas se multipliquen y se incurran en más gastos. Además se previenen abandonos de animales.
Según estimaciones de la Agencia Metropolitana de Control de Quito, el 90% de los perros callejeros tenían dueño y fueron abandonados. Mientras que en Guayaquil serían alrededor de 500.000 los animales en las calles, según estimaciones del Instituto Nacional de Investigación en Salud Pública.
Los precios de las esterilizaciones varían en los distintos centros veterinarios. Pero muchos profesionales realizan campañas mensuales a costos asequibles. En Guayaquil, por ejemplo, Gaby Vet ofrece este procedimiento a $12 en gatas, $8 en gatos y $20 perros.
Fuera de los gastos básicos, otras actividades como el baño, el paseo, entre otras, pueden ser distribuidas entre los miembros de la familia y ahorrar el costo de dichas actividades.
El servicio de peluquería para una mascota en un centro especializado fluctúa entre los $12 y $ 30.
Mariela Espinosa, prefiere bañar ella en casa a su perrito Lucky, pero el shampoo adecuado es recetado por el médico veterinario. Y para su gatito Leoncio, comenta, gasta mensualmente en arena para que haga sus necesidades. La funda de 10 kilos que ella adquiere cuesta cerca de $ 8 dólares.
Mariuxi Moreta, en cambio, ahorra en este rubro, puesto que ha preferido usar aserrín que le cuesta alrededor de $ 3. Para evitar malos olores hace la limpieza de la cajita y el patio a diario.
En el monto destinado para el cuidado de mascotas, es recomendable incluir un porcentaje para emergencias. Como en cualquier situación, contar con un dinero guardado para cubrir gastos fuera de presupuesto siempre es lo más sano para la economía familiar o personal.
Otros gastos adicionales lo componen los juguetes, placas o microchip de localización, collares, entre otros accesorios.
Incluso, se puede considerar un rubro en caso del fallecimiento de la mascota. Hay lugares que se encargan de cremarla o enterrarla. El precio varía, especialmente en los perros, por el peso y tamaño.
En Guayaquil, Campo Feliz ofrece cremaciones individuales y colectivas. La primera va desde los $ 120 hasta los $250; la segunda tiene un costo de $ 70.
DATOS
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) considera en la lista de los productos para calcular la inflación, en la división de Recreación y Cultura, entre otros, al alimento preparado para mascotas y productos anexos y gasto en médico veterinario.
Sin embargo, los rubros que genera el cuidado de las mascotas no están considerados como gastos deducibles en las proyecciones presentadas ante el Servicio de Rentas Internas (SRI). (I)