Publicidad

Ecuador, 08 de Noviembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Finaliza el rastreo bajo el agua de la reina de la apnea Natalia Molchanova

Nacida el 8 de mayo de 1962 en Oufa, había dejado la natación de competición a los 20 años para tener dos hijos. Foto: Agencia AFP
Nacida el 8 de mayo de 1962 en Oufa, había dejado la natación de competición a los 20 años para tener dos hijos. Foto: Agencia AFP
05 de agosto de 2015 - 14:16

Este miércoles ha cesado, en la isla de Formentera, la búsqueda submarina del cuerpo de la plusmarquista mundial de apnea, Natalia Molchanova, de 53 años, desaparecida durante una inmersión el domingo 2 de agosto.

No han dado resultados las repetidas zambullidas, de hasta 60 metros de profundidad, a lo largo de tres días, de los especialistas de la Guardia Civil. Tampoco resultó efectiva la ayuda de un robot de profundidad con cámaras de vídeo que la familia de Molchanova contrató a una empresa privada de Ibiza. Ahora se otea la superficie del mar. Se espera que la mujer pez, la reina de la apnea, aparezca flotando en algún lugar.

El mar que se tragó a la reina mundial de las inmersiones a pulmón libre reflotará probablemente su cadáver lejos del punto donde se lanzó a las profundidades y no retornó. Esa es la hipótesis de los expertos de la Guardia Civil y Salvamento Marítimo, especialistas en búsquedas y rescates.

Otros acreditados submarinistas, como Manu San Félix, experto submarinista de Formentera y colaborador de National Geographic, especulan con que pudo perecer al emerger, al quedar inconsciente y ahogarse, víctima de un síndrome de hipoxia.

Molchanova era capaz de nadar como un pez, sin respirar, durante más 3 minutos en una piscina, aguantar hasta los nueve minutos en apnea y sumergirse hasta 101 metros bajo el mar. No reapareció tras lanzarse a las profundidades aguas mientras adiestraba a tres jóvenes nadadores en las muy claras y turísticas aguas protegidas de Ses Illetes, a dos millas de la costa de Formentera.

Según el relato de sus compañeros, Natalia, de 50 kilos de peso, usaba un cinturón de lastre de seis kilos, para bajar más rápido, sin tanto esfuerzo. Era plusmarquista de este deporte, presidenta de la Federación de Apnea y trabajaba para una universidad de Rusia.

El límite de los descensos educativos del domingo en Formentera estaba en 35 metros, pero el fondo marino se sitúa a 80 metros en el lugar donde ancló el barco desde el que actuaba el grupo de la accidentada. Aquel día, Molchanova no usaba un cabo guía, una línea fija entre la superficie y el fondo que ayuda a marcar las operaciones de descenso, ascenso y descompresión y que puede guiar en caso de accidente.

En los minutos posteriores a la pérdida de contacto visual con Molchanova -que no retornó a la barca tras su ejercicio-, se perdieron las esperanzas de hallar con vida a la deportista. Sufrió un accidente cuyos detalles se ignoran, ya que no tuvo testigos cercanos.

La familia de la víctima asumió de inmediato que se trataba de un caso mortal en un deporte de alto riesgo, contra los límites del cuerpo. Un fallo fatal entre decenas de miles de inmersiones en décadas de actividad. El portavoz familiar fue el hijo, Alexey Molchanov, quien posee la sexta marca mundial de apnea, alcanzando los 101 metros con ayuda de peso de lastre.

Ahora, lanchas del servicio del mar y del grupo de actividades subacuáticas de la Guardia Civil navegan en una zona ampliada alrededor del lugar de los hechos. Peinan y otean una vasta superficie marina de decenas de millas, alrededor de Formentera. Cada día, entre el puerto de Ibiza y Formentera, cerca del lugar del accidente, pasan unas 15.000 personas a bordo de los transbordadores y barcos de línea. (I)

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

La apneísta guayaquileña tiene seis meses de gestación y continúa entrenando en la piscina. Su anhelo es disputar el mundial de Serbia.

Social media