Tristeza, amargura, impotencia. Los chilenos volvieron el lunes a sus trabajos y el tema de conversación no fue otro que la derrota ante Brasil por penaltis, en los octavos de final del Mundial. Los hinchas tradicionales de la ‘Roja’, pero también los chilenos a quienes no les interesa el fútbol, buscaban respuestas tras la eliminación de su selección.

Para muchos se trata de una generación dorada que batalló hasta el final. Por eso, no se han escuchado voces que señalen que se trata de un nuevo fracaso, pese a que Chile repitió la misma performance de Francia 98 y Sudáfrica 2010, con la salvedad de que esta vez se le ganó al campeón del mundo (España) y que se estuvo extremadamente cerca de vencer al gigante Brasil en su propia casa.

El partido del sábado en el estadio Mineirao de Belo Horizonte, visto por 800 millones de personas en todo el mundo, quedará en la memoria de los chilenos por décadas. Con la excepción del tercer lugar obtenido en el Mundial de Chile de 1962, nunca antes se estuvo tan cerca de avanzar tanto en una Copa del Mundo.

En Chile todos coinciden en que el tiro de media distancia de Mauricio Pinilla, que dio en el travesaño cuando faltaban apenas 2 minutos del tiempo extra, era la llave para vencer a Brasil. ¿Por qué no entró? ¿Por qué? ¿Por qué?

La ‘marea roja’ buscaba explicaciones. “Pinilla pudo pasar a la historia, pudo convertirse en leyenda”, es uno de los comentarios que más se ha escuchado en Santiago. “Vamos a recordar ese tiro de Pinilla por siempre”, repiten otros. No pocos creían que por la calidad de esta selección, al tener jugadores como Alexis Sánchez, Arturo Vidal y Gary Medel, Chile podía ganarle a Brasil.

Incluso esos mismos seleccionados insistieron una y otra vez en que ellos iban al Mundial para ganarlo. Si bien Chile falló en 3 penaltis, que terminaron por darle el triunfo a los ‘pentacampeones’, la mayoría ve a esta selección como heroica, como unos gladiadores, que jugaron sin miedo y sin complejos.

Copa América 2015

Especialmente triste fue el llanto de Medel al finalizar el partido. El defensa jugó lesionado y derramó lágrimas de impotencia. Muchos hinchas también lloraron. Muchos aún no creen que la pelota lanzada por Pinilla diera en el palo, un larguero de apenas 12 centímetros de ancho. ¿Por qué no entró? Pinilla y 17 millones de chilenos aún se lo preguntan. Pese a la derrota, la selección de Chile fue recibida cuando caía la tarde del domingo por la mismísima presidenta Michelle Bachelet.

En el recorrido que va desde el aeropuerto Internacional de Santiago hasta La Moneda, nada menos que 250 mil chilenos salieron a la calle para ovacionar a los jugadores y agradecerles por su garra.

En el palacio presidencial la selección de Sampaoli fue recibida por la mandataria y luego se asomaron por los balcones de La Moneda para saludar a la hinchada fiel agolpada en la Plaza de la Constitución. Medel se sacó una ‘selfie’ con Bachelet y la difundió a través de su cuenta en Twitter. Lo mismo hicieron otros jugadores como Pinilla. El ‘festejo’ sirvió como una suerte de catarsis colectiva. Y su masividad no tiene precedentes para un evento de este tipo en Chile. Porque la Roja’ no sucumbió ante nada, ante ningún rival. Porque esta ‘Roja’ tuvo mística y corazón; y un estilo ofensivo que empezó cuando Marcelo Bielsa se convirtió en su director técnico en 2007.

Para algunos, la celebración en La Moneda estuvo de más. Hay quienes creen que la derrota debe masticarse, que debe doler; que deben evaluarse los errores cometidos y que de una vez por todas se deben terminar los triunfos morales.

“Se jugó como nunca, pero no se perdió como siempre”, repetían ayer los chilenos en sus lugares de trabajo. Fue un tremendo adiós en La Moneda. Una inolvidable despedida en Santiago para una selección que ya piensa en la revancha, como lo recordó la propia Bachelet.

El próximo año Chile será sede de la Copa América, un trofeo que le ha sido esquivo al seleccionado chileno. Muchos jugadores, como el arquero y capitán Claudio Bravo, han dicho que esa será una nueva oportunidad, para demostrar que esta selección sí puede pasar a la historia del fútbol de la región.

Por ahora, en la historia quedará el 28 de junio de 2014 en el Mineirao. El día en que Brasil ganó por penales. O dicho de otra forma: el día en que Chile tuvo literalmente de rodillas a Brasil, en su estadio, con su gente, en su Mundial.

Julio César les tapó los penaltis a Pinilla, Alexis y Jara. Y los lanzamientos desde los 12 metros terminaron 3-2 a favor de Brasil. Pero esa es otra historia. La gran historia que quieren conservar los hinchas chilenos es la hazaña, la pelea que la selección que dirige Sampaoli le dio a Brasil. ¿Fue esta la única oportunidad que tendrá Chile para llegar lejos en un Mundial?
La tristeza aún es enorme. Algunos trataban de buscar consuelo en la dramática derrota de México ante Holanda, porque el elenco mexicano iba ganando y perdió cuando faltaban apenas 2 minutos. Otros dicen que a Chile le acompaña una eterna mala suerte. Algunos aún piensan en el palo de Pinilla y otros estiman que ‘Dios es brasileño’. También hay quienes creen que el gol de Hulk estuvo mal anulado. Pero hay 2 imágenes que reflejan lo que sucedió y que los chilenos han difundido a través de sus cuentas en Facebook y Twitter. Son 2 fotografías de las que se hablará por mucho tiempo. Ninguna corresponde al golpe en el travesaño de Pinilla, que la televisión ha repetido una y otra vez. Tampoco tiene que ver con el gol de Alexis del 1-1.

Las imágenes son 2: Medel llorando al final del partido –‘lágrimas de hombre’, como señaló el suplemento deportivo del diario La Tercera- y la otra en la que se ve al equipo brasileño –Neymar incluido- de rodillas y rezando durante los penales. “Brasil: que nunca se te olvide quién te tuvo así”, es la frase que acompaña esa foto. A Chile tampoco se le olvidará que estuvo a 2 minutos de la gloria. Palo maldito.