La pintura de la Independencia de Ecuador cobra vida
La Revolución Quiteña del 10 de agosto de 1809 fue el primer paso para lo que hoy es Ecuador como país y nación. Hace 210 años se encaminó la llamada Acta de la Independencia. Ese documento trajo consigo el establecimiento de un nuevo Gobierno, con separación de funciones, lo cual representó –para la época- una idea revolucionaria: Junta Suprema (Ejecutivo), Senado de Justicia (Judicial) y los diputados del pueblo (Función Legislativa).
A partir de entonces también se determinó que el territorio de Quito cuente con un Ejército, la “falange”. Y desde ahí las huestes labraron el camino a un proceso largo y complejo que, 21 años después, concluyó en la creación de la República del Ecuador.
Hace dos siglos, la pintura fue un registro de la historia. A través del pincel quedaron grabados personajes y acontecimientos a los cuales hoy damos vida: