Los expertos se decantan por una movilidad limpia
La aparición de ‘Peatonito’ encendió el ánimo de las personas que abarrotaban ayer la sala Demetrio Aguilera Malta de la Casa de la Cultura Ecuatoriana (CCE).
La máscara y la capa, características de los personajes de lucha libre, sorprendieron a más de uno.
Con la ‘cancha’ de sus 5 años de trabajo en contra de la motorización de las ciudades, el mexicano no necesitó de llaves ni patadas voladoras para captar la atención de los espectadores.
Hablando en inglés, el personaje se pronunció en favor de causas como la conversión de los pasos elevados en espacios para movilidad alternativa; la transformación de los pasos peatonales elevados y la intensificación del uso de la bicicleta en las urbes.
El principal argumento para ello fueron los estudios que muestran la relación existente entre las emisiones contaminantes y el aumento de los casos de alzhéimer.
Una de sus abuelas, activista de la movilidad alternativa, murió con la enfermedad y ello lo motivó a la creación de ‘Peatonito’ y el inicio de su lucha en favor de los peatones a partir de 2011.
El ficticio luchador citó como otro de los inconvenientes derivados del aumento del parque automotor urbano, que el 80% del ruido que soportan las ciudades actualmente es producto de su operación.
Al grito de ‘Viva the pedestrian revolution’ (Viva la revolución pedestre) se despidió de la audiencia, conminándola a participar en su lucha contra los vehículos.
El público asistente respondió con un cerrado aplauso la intervención del activista, que marcó ayer un punto de inflexión en la mesa redonda desarrollada sobre transporte y movilidad en el marco de la conferencia Hábitat III.
Más temprano, el representante de la Agencia Internacional de Energía (IEA, por sus siglas en inglés), Fatih Birol, presentó una ponencia que impulsa el cambio de modelo energético en el mundo y especialmente en las ciudades.
El ejecutivo apuntó que las urbes representan en la actualidad más de la mitad de la población mundial y el 80% del producto interno bruto (PIB) del planeta.
Esta condición convierte a las ciudades en las productoras del 70% de las emisiones totales de dióxido de carbono (CO2) relacionadas con energía.
Birol planteó que los ahorros energéticos pueden lograrse reduciendo la necesidad “de una serie de servicios energéticos”, como la rebaja de la longitud y frecuencia de los trayectos de viaje, especialmente en ciudades compactas.
Apuntó, también, la posibilidad de modificar los hábitos de movilidad, actualmente atados al uso de vehículos motorizados. Ejemplo de ello son la implementación en muchas ciudades, incluida Quito, de redes de ciclovías y sistemas de bicicleta pública.
De la misma manera, Bory Kashambo, del grupo ICAO RD, se refirió a los objetivos de desarrollo sostenible planteados por los integrantes de las Naciones Unidas hasta el año 2030.
Habló, en específico, sobre la necesidad de reducir emisiones contaminantes con el fin de detener los efectos del cambio climático.
Kashambo planteó de manera puntual la importancia de fortalecer los sistemas de transporte público para hacerlos accesibles y amigables para las personas. También definió como una de las prioridades la generación de facilidades para la movilización de transeúntes en las ciudades. (I)