El académico y urbanista Fernando Carrión cree que el Estatuto Autonómico de Quito generará oportunidades en distintos ámbitos para el desarrollo de la capital de la República.

El asesor del alcalde Jorge Yunda basará su apoyo al gobierno local en la elaboración del documento.

¿Qué se busca con el Estatuto Autonómico de Quito?

Que la ciudad pueda tener un desarrollo no vinculado totalmente al Estado, que sea autónomo. Lo que establece la Constitución de 2008 es que los distritos metropolitanos tendrían la competencia de los cantones, de las provincias y de las regiones.

¿Qué atribuciones específicas puede lograr la ciudad a través del documento?

Hoy día el peso de las ciudades es grande en el ámbito económico. Pero eso no está reconocido explícitamente en las funciones y competencias entregadas hasta ahora por el Estado. Hay que trabajar con la economía virtual y donde esas empresas pagan impuestos (para aprovechar esos ingresos). Habrá que trabajar sobre el acceso a lo que produce la ciudad. Ese tipo de cosas debería aparecer en un estatuto autonómico.

¿Qué ocurre en el ámbito administrativo de la capital?

Habrá que discutir el modelo administrativo: ¿una alcaldía mayor, varias alcaldías menores?; o una alcaldía provincial y varias distritales. O repetir el esquema actual de Quito de una alcaldía central y administraciones zonales.

¿Cómo se registrará la participación ciudadana?

La idea es utilizar mucho la tecnología. En el acto de inicio de redacción haríamos una conferencia internacional para recoger experiencias de América Latina. Y tendremos alrededor de 200 nodos en comités barriales, colegios profesionales, universidades, cámaras empresariales, etc. Luego haremos una primera versión y, también, mesas de trabajo de Cultura, de Derecho a la Ciudad, Participación Ciudadana. Y se harán versiones hasta que el texto esté listo para ser presentado al Concejo.

¿Cuánto durará este proceso?

Debería durar alrededor de un año (incluido el plebiscito aprobatorio de la ciudadanía). (I)