Trabajadores evaluaron en las calles la era de Rafael Correa
El Día Internacional del Trabajo se recordó y celebró en donde nació: las calles. Y fue la fuerza laboral la que ayer se tomó las avenidas de distintas ciudades para, desde sus orillas, celebrar y reprochar las políticas que se han ejecutado en los últimos 10 años, durante las presidencias de Rafael Correa.
Portoviejo, capital manabita, fue el epicentro de una multitudinaria marcha de trabajadores encabezados por la dirigencia de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT).
La movilización inició a las 10:00 desde el sector de la Rotonda, siguió por la avenida Urbina hasta la plaza Eloy Alfaro en el centro de la urbe.
Allí el titular de la CUT, Oswaldo Chica, manifestó que los trabajadores en estos 10 años dejaron de ser un instrumento al servicio de las élites de la oligarquía porque las relaciones de poder cambiaron. “En el gobierno de Rafael Correa se privilegió al ser humano sobre el capital”, recordó el dirigente.
Chica enumeró las conquistas logradas en los 10 años de Revolución Ciudadana como el fin de la tercerización y el acuerdo tripartito entre gobierno, trabajadores y empresarios para fijar un salario mínimo vital que es uno de los más altos de la región. Además dijo que en el nuevo gobierno de Lenín Moreno el sindicalismo progresista también resultará fortalecido.
Correa también participó de la movilización y recordó lo alcanzado en la última década. Enfatizó el fin de la tercerización. “Existía la contratación por horas sin estabilidad, pero si ustedes sacrifican eso, deben ser compensados de alguna forma; eso era explotación de doble vía, todo en función del capital”, rememoró el gobernante saliente.
El jefe de Estado también reconoció los avances logrados para sectores como las trabajadoras remuneradas del hogar, servidoras sexuales, personas con discapacidad y la disminución del trabajo infantil.
El FUT comandó marchas opositoras en dos ciudades
La marcha en Quito concentró a la vieja y también semirenovada dirigencia sindical del Frente Unitario de Trabajadores (FUT) al celebrar 131 años de su Día Clásico.
La concentración de los trabajadores empezó desde tempranas horas y fue liderada por Mesías Tatamuez, Nelson Erazo, Luis Macas, Geovanni Atariguana, Óscar Sánchez, José Villavicencio, dirigentes activos del FUT, de la Confederación Ecuatoriana de Organizaciones Sindicales Libres (Ceosl), la Cedocut y la Unión General de Trabajadores del Ecuador (UGTE) y de la Conaie.
Todos ellos demandaron un firme combate a la corrupción, reformas laborales, defensa del empleo, que ya no se despida a más trabajadores y garantizar la estabilidad laboral.
Durante la marcha, que se efectuó desde el parque del Ejido en la Av. 10 de Agosto y Patria hasta la plaza de Santo Domingo, los laboristas a través de cánticos y eslóganes solicitaban el respeto a los derechos humanos, la derogatoria de los decretos 739 que trata sobre la regulación de las organizaciones sociales y sindicales y el 813 que es la ley orgánica de Servicio Público, reformas al COIP, expedición del nuevo código del trabajo, la devolución del 40% de los aportes de los afiliados por parte del Estado, libre acceso a la universidad, reforma agraria y una mayor apertura al diálogo por parte de Lenín Moreno.
En la plaza de Santo Domingo los sindicalistas hicieron un homenaje a la Comisión Anticorrupción integrada por Simón Espinosa, Jorge Rodríguez, Julio César Trujillo, Isabel Robalino y Alfredo Rodas, quienes pidieron defender la democracia y continuar con la lucha.
Un panorama similar se vivió en la avenida 9 de Octubre en Guayaquil. Las banderas rojas del FUT y de Unión Popular (exMPD) dominaron el horizonte de la marcha que se extendió hasta pasado el mediodía.
En sus proclamas, los dirigentes prometieron mantener la oposición en contra del nuevo gobierno de Alianza PAIS. (I)