El Ecuador y la empresa china CTC acordaron, en 2013, un contrato por $ 36 millones para la adquisición de dos radares para el control del espacio aéreo del Ecuador, a cargo de las Fuerzas Armadas.

Al no contar con la instalación, punto acordado en el contrato, Ecuador decidió la finalización del mismo en marzo de 2013. Esto devino cuatro demandas: tres por parte del Estado ecuatoriano y una por CTC.

Estas demandas se realizaron: la primera el 25 de junio de 2013; la segunda el 26 de junio del mismo año por el pago de valores por concepto de multas por la suma de $ 15,7 millones; y la tercera el mismo día por daños y perjuicios causados al país por $ 180 millones.

Sin embargo, este mismo 26 de junio del 2013, CTC entabló una contrademanda por $ 263 millones en contra del Estado ecuatoriano por presunto daño y perjuicio.

“El Ecuador no ha perdido un centavo. Entregó $ 36 millones de adelanto y recuperó esta misma cantidad más los $ 3 millones por el buen uso del anticipo”, afirmó el viceministro de Defensa, Felipe Vega de la Cuadra.

A partir del 9 de noviembre de 2015, tanto el Gobierno ecuatoriano como CTC iniciaron un proceso de mediación que permitiría llegar a un acuerdo amistoso, el cual quedó en suspenso.

A pesar de estos contratiempos, el viceministro Vega de la Cuadra afirmó que las relaciones con la República Popular China siguen en buenos términos. Además, anunció que se realiza una nueva contratación con empresa española para obtener cuatro radares para el control del espacio aéreo nacional. (I)