Yoko Ono culpa a Paul McCartney de la separación de Los Beatles
La famosa expareja del fallecido John Lennon, Yoko Ono, culpó y responsabilizó a Paul McCartney de la disolución del grupo Los Beatles.
Así lo señaló en un libro lanzado últimamente por la periodista Joe Smith, basado en entrevistas inéditas que fueron reveladas por la escritora.
En una conversación con Yoko Ono en 1987, la mujer señaló que “la disolución de The Beatles fue un proceso de divorcio que involucró a los cuatro integrantes de la banda”.
Y agregó: “esta separación fue propiciada por el malestar que sentían John Lennon, George Harrison y Ringo Star hacia Paul McCartney, ya que llegó un momento en que estaban volviéndose cada vez más independiente, así que no fue John el primero que planteó abandonar la banda, sino Ringo, después George y al último John”.
“Paul era el único que deseaba mantener unidos a The Beatles, pero el resto sentía que no eran más que miembros de la banda de Paul, a lo que se sumó el hecho que tuve que lidiar por años con el estigma de ser la responsable de la disolución del grupo”, concluyó la artista, quien fue acusada por el mundo de la música como la artífice de la disolución de la legendaria banda inglesa.
Poco antes y después de su separación oficial, cada uno de ellos publicó álbumes en solitario, aunque algunos de sus discos contenían contribuciones de los otros miembros. ‘Ringo’ (1973), de Ringo Starr, fue el único álbum que incluía composiciones e interpretaciones de todos ellos, aunque en canciones grabadas por separado.
Harrison mostró su conciencia sociopolítica al arreglar el concierto para Bangladesh, en la ciudad de Nueva York, en agosto de 1971, junto al maestro del sitar Ravi Shankar, ganando así respeto por su contribución a la ayuda de aquel país, devastado por la guerra (con el consiguiente refugio de una parte de la población al país vecino, la India), y un posterior desastre natural en forma de ciclón.
Aparte de un inédito ‘jam session’ de 1974 (aparecido después en el bootleg A toot and a snore in ‘74), Lennon y McCartney nunca más volvieron a grabar juntos.