La XV edición del Festival de música independiente Quitofest inició a las 11:00  de hoy, con la presentación de la banda Tonicamo.

Se habilitaron 3 accesos para el público, al lado sur oriental, en el barrio El Dorado, como estaba programado. Alrededor de dos millares de asistentes habían pagado su entrada e ingresado hasta las 15:00.

El la agrupación Swing Original Monks fue la que más ha encendido los ánimos del público hasta esta hora. Los músicos interpretaron una versión en su particular estilo del tema «Odiame», surgido de un poema peruano que Julio Jaramillo inmortalizó en un bolero.

La de este año es la primera edición del Quitofest en que la entrada tiene un costo, $30 por día, el cual, según los organizadores, servirá para que el evento anual se sostenga sin necesidad de auspicios públicos.

La cantante y actriz Ximena Sariñana llegó desde México a la primera jornada del festival y estrenó, por primera vez en un escenario, el tema «Zaguaro». La artista habló, durante la corta rueda de prensa que las bandas convocadas este año dan en el Palacio de cristal luego de sus presentaciones, de su trabajo con la ONG Greenpeace en favor del medio ambiente.

Antes del show que ofrecieron Sariñana y Swing Original Monks, los músicos de Papaya Dada subieron al escenario con un repertorio en que destacó la cumbia y chicha. La banda confirmó que el cantante Carlos Valdivieso dejó sus filas por problemas de salud y mostró estar acoplada para eventos de este calibre.

En la noche se espera el concierto de Café Tacvba, mexicanos que son una de las propuestas estelares del Quitofest 2017; mientras que mañana la segunda jornada la cerrarán Sepultura, Kataklysm, Abandon y, entre otras, Barón Rojo.

Esta última agrupación, española, llegó esta tarde a Quito, proveniente de Guayaquil, ciudad en que hicieron una escala. (I)