Que el venezolano Carlos Mata haya cantado en Guayaquil, el 14 de febrero -Día de los enamorados-, se debe a la iniciativa de un grupo de amigos que en una noche de plática escucharon uno de los éxitos de este cantante en un iPod.

Eso fue hace tres años, pero el presentador deportivo Andrés Guschmer recuerda como si fuera ayer cuando al término de la canción se puso a ‘googlear’ para ver “en qué se hallaba Mata” y conocer las posibilidades que habían para traerlo a Guayaquil, ciudad que visitó por primera vez a inicios de los 90.

Guschmer comentó, minutos antes que apareciera el venezolano en el escenario de uno de los salones del hotel Sheraton, que pertenece a la época en donde Mata era el galán de galanes en las telenovelas. “Mis contemporáneos recordarán que era casi una obligación ver telenovelas en casa porque  se prendía la televisión para ver el Show de Bernard y después daban varias novelas hasta que finalmente comenzaba El Chavo del 8, que era lo que queríamos ver. Así que si hay un hombre en este salón que diga que no ha visto una telenovela está mintiendo”, bromeó Guschmer.

Comentó además que en esa época todos los hombres querían ser o parecerse al “bacán” de Tito Clemente, personaje que interpretó Mata en ‘La dama de Rosa’ junto a Jeannette Rodríguez, en 1986.

Faltando cinco minutos para las once de la noche, el cantante nacido en Valencia, Venezuela, el 28 de agosto de 1955, subió al escenario con un jean color petróleo y una chaqueta azul marino en medio de los aplausos y gritos de sus fans. Con el tema ‘Con la miel en los labios’, canción del disco ‘Mírame a los ojos’ (1993), abrió su espectáculo dedicado a los enamorados.

Desde el principio del show fue evidente que el intérprete, quien actuó en más de 25 telenovelas transmitidas en más de 60 países, no entonaba como lo hacía 20 años atrás, pero aún así cautivó a los presentes con sus éxitos conocidos, a pesar que el sonido y el coro en ocasiones no iba al ritmo del artista.

También interpretó temas como ‘Vuelves a mí’, ‘Castellana 21’, ‘No me arrepiento’, entre otros temas, que a pesar de ser pocos conocidos en el país guardaba el mismo estilo romántico, sutil y elegante que ha caracterizado a este cantante que ha grabado 9 discos en español, uno en italiano y ha recorrido más de 19 países en giras musicales.

Mata se sintió bastante cómodo en el escenario, que se dio tiempo para hablar con su director artístico para solucionar las pequeñas fallas de sonido que se presentaban mientras transcurría la noche. Por eso pidió disculpas por los problemas técnicos e inclusive bromeó diciendo: “Si hay algo que está mal aquí soy yo”.

Reconoció que está feliz de volver a Guayaquil, donde lo cobijaron con mucho cariño, respeto y nostalgia. Aseguró que varias de sus canciones eran las responsables de matrimonios y hasta divorcios de algunas parejas.

Bromeó con su edad al contar que en un viaje de Nueva York a Miami se topó con una cubana que aparentaba más de 80 años y al reconocerlo le expresó: “Óyeme chico, pero si estás acabado...Arruinado, ¿qué te pasó chico?”. Comentario que por supuesto robó risas de la gente.

También reconoció que a pesar que las telenovelas fueron las que le dieron el éxito que tuvo en su carrera, no se familiariza con ellas. Sin embargo, no dudó en cantar su éxito ‘Presiento’, que identificó al culebrón Cristal, en 1986. Los gritos invadieron el recinto a más no poder, aunque fue el tema ‘Di que tú’, de la telenovela ‘Señora’ (1988), que más aplausos y aceptación tuvo entre el público.

También entonó ‘Dónde está ese amor’, ‘Que porqué te quiero’, ‘Puesto a valer’, ‘Amaneciendo’ y el exitazo ‘Déjame intentar’, que causó euforia en los presentes que lo acompañaron de principio a fin.

Mata se despidió agradeciendo a sus fans por su asistencia, prometió volver y anunció que este año retomará con fuerza su carrera musical.