'Un amor inquebrantable', más que una prueba de fe
John (Marcel Ruiz), un joven de 14 años, cae en el fondo de un lago congelado de Misuri, cuando comparte con sus amigos de la escuela. Luego de casi 15 minutos es rescatado helado, casi inerte por los bomberos, y llevado a un hospital.
Los doctores no le dan esperanzas de vida y sus amigos ven con desilusión que su vida se apaga. Casi todos se rinden, menos su madre, Joyce, que no descansará hasta verlo con vida.
Esa es la trama de la cinta Un Amor Inquebrantable, (Breakthrough), que se estrenó en las salas de cine este fin de semana.
El filme, un drama de fe, está basado en la historia real de John, un joven cuyos médicos no son optimistas de que luego de caer en un lago de hielo sobreviva.
Ambientación
Para entender al personaje de Joyce, interpretada por la actriz Chrissy Metz, hay que observar su contexto.
Joyce y su esposo Josh son un matrimonio que asiste a una iglesia cristiana de Estados Unidos, en donde la fe es su ingrediente principal.
En el hogar, Joyce es fuerte, al igual que en su comunidad, en donde no dudará en expresar sus opiniones, así no sean “políticamente correctas”.
Luego del accidente de John, que es su hijo adoptivo, Joyce deberá afrontar sus propios miedos, sus creencias, pues el amor de su familia que había construido en años se desvanecía en solo unos minutos.
Si bien el filme es un drama, tiene altas dosis de vértigo, principalmente cuando John cae en el lago y se vuelve inminente la desesperación por rescatarlo.
Desde ese momento, cada minuto contará para salvar su vida, con la ayuda de la ciencia, así como con el apoyo familiar y la fe de su comunidad. La cinta es una adaptación del libro Lo Imposible, escrito por la misma Joyce Smith, luego de sufrir esa experiencia con su hijo.
Más allá de la fe, Un amor inquebrantable plantea otros tópicos como la aceptación, el amor familiar, la amistad y el anhelo de vivir, que va más allá de la mera existencia.
Su banda sonora impacta, en donde destaca “Love wins”, de la cantante Carrie Underwood, que en su lírica expresa casi a la perfección que solo el calor familiar puede derretir hasta al frío más intenso. (I)