La justicia australiana levantó este miércoles la orden que bloqueaba temporalmente la venta en el país oceánico de la tableta Galaxy Tab 10.1, fabricada por la empresa surcoreana Samsung.

El Tribunal Federal, en el juicio de apelación celebrado hoy en Sídney, decidió de manera unánime permitir la distribución del dispositivo del fabricante surcoreano.

El mes pasado, el Tribunal Federal australiano prohibió temporalmente la venta de la tableta de Samsung después de que la empresa estadounidense Apple acusó a los surcoreanos de infringir varias patentes vinculadas a las pantallas táctiles y los movimientos de control del aparato.

Tras la sentencia revocatoria, Apple indicó que recurrirá ante el Tribunal Superior, máxima instancia judicial en Australia, para que la decisión vuelva a posicionarse a su favor.

La empresa norteamericana solicitó que el levantamiento de la prohibición no se aplique hasta el próximo viernes a las 16.00 hora local (05.00 gmt), solicitud que fue concedida, informó la agencia local AAP.

Más de 600 tiendas en Australia se habían preparado para comercializar esta tableta antes de la prohibición de cara a la campaña de Navidad.

Las dos empresas han estado inmersas en una batalla legal de patentes por sus tabletas y smarthphones en diez países del mundo, que incluye los intentos de Samsung por bloquear la venta del iPhone 4S de Apple en cuatro países, entre ellos Australia.

Apple sostiene que la empresa surcoreana ha copiado en su línea de smartphones y tabletas electrónicas el diseño y funciones de los iPhone y iPad, mientras que Samsung afirma que el estadounidense ha plagiado algunas de sus ideas de software.