El videojuego Pokémon Go, disponible desde está semana en  Ecuador, se ha convertido en una verdadera y rotunda fiebre. Cada día nos encontramos nuevos y peculiares casos acerca de cómo está afectando a usuarios de todo el mundo y en todos los ámbitos.

La realidad es que Pokémon es una saga bastante longeva y esto está provocando que no solo jóvenes y niños sufran las consecuencias de la adicción a este juego, una importante cantidad de personas entre los 25 y los 35 años se ha criado con estos pequeños monstruos digitales que han traído problemas a sus actividades. Esto ha hecho que varias compañías públicas y privadas se den a la tarea de prohibir a su personal utilizar su tiempo en este tipo de entretenimientos.

Por ejemplo, la compañía Boeing prohibió a sus empleados jugar Pokémon Go en sus horas de trabajo. Tomó la decisión de colgar varios anuncios a lo largo de las naves y además, envió correos electrónicos a sus empleados para que se cercioren de la normativa.

No es la única de las grandes compañías de Estados Unidos que se ha visto obligada a prohibir el juego en sus instalaciones, eso sí, para los empleados.
Otro de los espacios en los que se ha prohibido su uso es en los museos al considerar que resultaría molesto ver al personal ‘cazando’ pokémones en un lugar cultural.

Y es que jugar Pokémon ha dado dolores de cabeza a más de uno, como lo que le pasó a Boon Sheridan, un ciudadano de Massachusetts, quien al asomarse a su casa se percató de que alrededor se aglomeraban cada vez más jóvenes. Pensó que se estaba volviendo loco o que su vivienda, que anteriormente había sido utilizada como iglesia, se estaba quemando.

Pero no solo a las personas comunes les afecta esta fiebre. En Australia, una comisaría también fue invadida por jóvenes que perseguían un Sandshrew, un pokemon bastante interesante.

La policía avisó a través de Facebook que no iba a permitir la entrada a los jóvenes, y que deberían mantenerse en la calle; aunque en realidad se lo tomaron con bastante humor.
“No deben entrar a la comisaría. Tengan cuidado al cruzar la calle. Les comunicamos que Sandshrew no irá a ninguna parte por ahora. ¡Lo mantenemos a salvo y ya laaargense!”, decía el mensaje que emitió en Facebook ese despacho policial.

Mezclar la conducción con Pokémon Go es sinónimo de mala compañía para más de uno en Nueva Gales del Sur, en Australia. En esa localidad, 2 conductores fueron multados con $ 325 dólares australianos cada uno por jugar Pokémon mientras conducían.

Otro de los casos más peculiares fue el de un ciudadano norteamericano que se dedicó a cazar un Pidgey al momento en que su esposa entraba a la sala de partos. La fotografía se convirtió en viral con más de 3 millones de visitas en un día.

Prohibiciones más serias

El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, pidió a las autoridades estatales que prohíban jugar Pokémon Go a los cerca de 3 mil agresores sexuales de los que se tiene registro en el estado y que ahora están en libertad condicional, con la finalidad de proteger a los menores de edad que lo usen.

El Departamento de Centros Correccionales y Servicios Comunitarios hará que esto sea una condición para la libertad condicional de abusadores sexuales que salgan de prisiones estatales. Las autoridades recomendaron que las oficinas de libertad condicional en los condados adopten la misma disposición.  “A medida que evoluciona la tecnología, debemos asegurarnos de que los avances no representen nuevas formas para que depredadores peligrosos cacen a sus nuevas víctimas”, dijo Cuomo. La oficina del gobernador indicó que aún no se ha sabido de ningún incidente, pero que el potencial está ahí.

Cuomo también ha enviado una carta a la desarrolladora de la aplicación, Niantic, para solicitar que se prohíba que los agresores sexuales usen el juego en el que los usuarios deambulan por el mundo real buscando pokémones virtuales.

A la par, el Ejército de Israel prohibió desde esta semana a sus integrantes jugar en esta plataforma en bases militares debido a cuestiones de seguridad. La institución advirtió que Pokémon activa cámaras en los celulares y servicios de localización que podrían filtrar información delicada como la ubicación y fotografías de bases militares.

A los civiles en Israel también se les ha alertado de los peligros de perseguir a Pikachu y otras criaturas digitales del juego. La Asociación del Cáncer de Israel aconsejó a los jugadores no salir al exterior a atrapar a estas criaturas a plena luz del día y a evitar la excesiva exposición al sol, además de otras recomendaciones para protegerse de los rayos solares. (E)

DATOS

Aunque el juego aún no llega a Latinoamérica, en Argentina existe una asociación de madres de familia que prohibirá el uso de este juego virtual a los escolares.

En España una aseguradora anunció que por cada compra de un paquete regalarán un teléfono inteligente para que puedan jugar Pokémon Go.

En Nueva York una mujer de origen guatemalteco amarró los pies de su hijo porque no paraba de cazar pokémones y se desviaba del camino a la escuela.