El grupo informático International Business Machine, más conocido como IBM, celebra este jueves su centenario ondeando la bandera de la innovación como fórmula clave para haberse mantenido como una compañía líder en el cambiante y competitivo sector tecnológico durante todo un siglo.

"Es muy extraño que las compañías duren tanto tiempo, especialmente empresas que cotizan en bolsa, y es muy raro que además sean líderes en su sector década tras década durante un período tan largo de tiempo", valoró Steve Hamm, del departamento de comunicación de la compañía, durante una entrevista con Efe.

Hamm es uno de los tres periodistas que han escrito el libro "Making The World Work Better" (Haciendo que el mundo funcione mejor, en español), con cuya publicación IBM quiere celebrar sus cien años de existencia y en el que se trata de desgranar la larga y cambiante historia de esta empresa desde que fuera fundada el 16 de junio de 1911 por Thomas J. Watson.

Según el escritor, la clave de la longevidad de la empresa reside en que "en muchas ocasiones fue capaz de hacer grandes cambios antes de que fueran absolutamente necesarios", entre los que destacó el realizado en la década de los 60 bajo el liderazgo de Thomas Watson Jr., hijo del fundador de la compañía.

En esa época Watson, "a pesar de que IBM era una compañía líder, se dio cuenta de que sus clientes necesitaban una forma diferente de computación", según Hamm, por lo que se embarcó en lo que algunos consideraron entonces como la mayor apuesta empresarial de todos los tiempos, el lanzamiento de la supercomputadora central System/360, que revolucionó completamente el mundo de la informática.

Hasta la llegada de esa revolucionaria máquina, los computadores trabajaban por lotes, es decir, tenían que concluir una tarea para comenzar la siguiente, pero System/360 introdujo por primera vez el concepto de la multi-tarea y el computador incluso ayudó a la Agencia Espacial Estadounidense (NASA) a enviar a los primeros astronautas a la Luna.

Hamm reconoce también que IBM -que es uno de los 30 componentes del índice Dow Jones de Industriales- no tuvo esa capacidad de adelantarse a los cambios en los años 90, cuando como consecuencia del "boom" de los ordenadores personales (que la misma firma contribuyó a expandir con el lanzamiento en 1981 de su modelo 5150 PC) eran cada vez más las compañías que optaban por los PC en red, en lugar de los sistemas centralizados.

"Fue un momento difícil, la compañía estaba siendo demasiado burocrática, no fue capaz de sobrellevar el cambio y no estaba siendo lo suficientemente innovadora", explica el periodista.

En ese momento IBM comenzó a ser vista como una empresa estancada en el pasado, sin la capacidad innovadora de otros gigantes que nacían a su lado como Microsoft, que bajo el liderazgo de Bill Gates logró triplicar la capitalización bursátil de IBM en menos de diez años.

A comienzos de los 90 el llamado "gigante azul" perdía miles de millones de dólares al año, aunque la llegada de Louis Gerstner en 1993 a la dirección de la compañía logró reducir drásticamente los costes de la tecnológica.

Sin embargo no fue hasta 2002, con el actual consejero delegado de IBM, Samuel Palmisano, cuando la compañía inició un cambio en su modelo de negocio más orientado en el software y los servicios que impulsaría los buenos resultados que ha estado ofreciendo en los últimos trimestres y que llevaron a que en mayo pasado lograse superar la capitalización bursátil de Microsoft por primera vez en 15 años.

Estos años la compañía ha liderado la innovación en su sector, de forma que según la revista Forbes se situó el año pasado como la compañía más "inventiva" de Estados Unidos con un total de 4.914 patentes registradas en este país en un solo año.

Pero Palmisano lleva ya nueve años al frente de IBM y cada vez se hacen más fuertes los rumores sobre su posible sucesión, que según publicó esta misma semana el diario Wall Street Journal citando a fuentes cercanas a la compañía podría producirse en los próximos 12 a 18 meses.

Su nuevo directivo tendrá que enfrentarse al reto de continuar con los buenos resultados del grupo informático, que en 2010 aumentó sus ganancias hasta 14.843 millones de dólares, lo que supone el beneficio más elevado jamás logrado por esta empresa, y continuar invirtiendo en nuevas tecnologías para no volver a quedar atrás como ocurriera en los 90.