HP fusionará sus negocios de computadoras personales e impresoras
El grupo informático Hewlett-Packard confirmó este miércoles que fusionará su división de ordenadores personales con la de impresoras en un amplio proceso de reestructuración cuya meta es mejorar el rumbo de la firma.
La presidenta y consejera delegada de HP, Meg Whitman, indicó en un comunicado que "esta combinación unirá dos negocios en los que HP ha establecido un liderazgo mundial" y señaló que "esperamos crear así un escenario ganador para accionistas, clientes y socios".
Una vez concluida la renovación interna, el nuevo departamento quedará en manos de Todd Bradley, hasta ahora responsable de la división de PCs, mientras Vyomesh Joshi, al frente de la división de impresoras, se retirará de la empresa.
HP explicó que los cambios permitirán a la firma integrar unidades de negocio que se solapaban, mejorar servicios como el de atención al cliente, aumentar la productividad y ahorrar costes en un momento en que la compañía se planteaba recortar empleos.
Se trata del último gran movimiento de Whitman para responder a los problemas que atraviesa desde hace tiempo el grupo informático, cuya dirección asumió el pasado septiembre en sustitución de Léo Apotheker.
El mayor fabricante mundial de ordenadores personales por cuota de mercado y número de unidades cuenta en la actualidad con dos divisiones separadas que generan unos ingresos anuales conjuntos de unos 65.000 millones de dólares.
HP, con sede en Palo Alto (California), anunció el pasado febrero que en el primer trimestre de su ejercicio fiscal 2012 (noviembre-enero) ganó 1.468 millones de dólares, el 43,64 % menos interanual, mientras su facturación se redujo en el mismo periodo el 7 % hasta 30.063 millones de dólares.
Tras conocerse la noticia, que la víspera fue adelantada por The Wall Street Journal, las acciones de la compañía descendían hoy el 1,17 % una hora después de la apertura de la bolsa de Nueva York.
Los títulos de HP, uno de los 30 componentes del índice Dow Jones de Industriales, se han depreciado el 43,25 % en los últimos doce meses en el parqué neoyorquino.