El gigante tecnológico Apple abrió, en días pasados, en Pekín, su tienda más grande en Asia, que además es la sexta en territorio chino y la tercera que la firma estadounidense ubica en esta capital, informó la agencia oficial Xinhua.

Con un área de 2.300 metros cuadrados y más de 300 empleados, el establecimiento está ubicado en la céntrica calle pequinesa de Wangfujing, una de las más comerciales de la ciudad, detalló el vicepresidente de la cadena de tiendas minorista de Apple, John Browett, según Xinhua.

Cientos de fanáticos chinos de Apple se congregaron en los alrededores de la tienda y formaron largas colas para conocer el flamante local que abrió sus puertas por primera vez. "Vamos a morder la manzana", comentó uno de los clientes, de acuerdo a la fuente.

La firma inventora de productos tecnológicos como el iPhone o el iPad actualmente posee 390 tiendas en todo el mundo y con planes de expandir su presencia aún más en este país asiático.

Browett adelantó que su compañía está a punto de abrir un nuevo establecimiento en la ciudad de Shenzhen, en el sur de China, y que en el futuro tendrá más en todo el territorio chino.

A pesar del éxito de sus ventas en China, la compañía se ha visto afectada por denuncias laborales y huelgas de chinos que trabajan en empresas socias de ésta y a las que acusan de imponer abusivas condiciones laborales e, incluso, de emplear en sus fábricas a menores de edad.

Esta semana, la firma taiwanesa Foxconn, contra la que frecuentemente ciudadanos chinos presentan denuncias laborales, reconoció que empleó a 500 menores de edad en una de sus fábricas en China, la de Yantai, en la provincia de Shandong (este), y pidió disculpas por eso.

Mientras que a inicios de este mes, miles de trabajadores de otra instalación de Foxconn en Zhengzhou (centro), en la que se fabrica el iPhone 5, se declararon en huelga por las abusivas condiciones laborales, lo que paralizó la producción del teléfono de Apple.

La huelga tuvo lugar dos semanas después de que otra planta de la firma, en esa ocasión la de Taiyuan (capital de Shanxi, al norte), tuviese que cerrar durante más de 24 horas tras incidentes en los que se vieron envueltos hasta 2.000 trabajadores y que motivaron el ingreso hospitalario de una decena de ellos.

A principios de septiembre, se produjo un suicidio en las plantas de Foxconn, el segundo tras el acuerdo firmado entre esta compañía y Apple para mejorar la situación de los trabajadores.

El convenio se alcanzó después de que más de un centenar de empleados de la compañía amenazara el pasado enero con suicidarse en masa saltando de un tejado de la fábrica.

Este suceso añadió presión a Apple, que aceptó que la organización independiente, Asociación de Justicia Laboral (FLA), efectuase una investigación, la cual reveló que los trabajadores chinos de la compañía trabajan, en ocasiones, hasta más de 60 horas a la semana.