Vicepresidenta de la República continúa su trabajo por humanizar el servicio público
“La desaceleración de los daños ocasionados por covid-19 implica también visibilizar y atender la realidad que viven niñas, niños y adolescentes con enfermedades
catastróficas. Preocuparse y ocuparse del que ha sido invisibilizado”. En el marco del eje social en torno a la atención prioritaria de niños y niñas que padecen enfermedades crónicas o degenerativas, una de las funciones delegadas a la Vicepresidencia de la República del Ecuador, este martes, la vicepresidenta María Alejandra Muñoz junto al gerente de esta casa de salud, Dr. Carlos Ibarra y al coordinador de Zonal del MSP, Francisco Pérez, recorrieron el Hospital del Niño Dr. Icaza Francisco de Icaza Bustamante, en la ciudad de Guayaquil.
La visita tuvo como objetivo “constatar las capacidades del área oncológica infantil, que nos permita poner en el centro a quienes por la pandemia han quedado más
invisibilizados. Trabajamos en la humanización del servicio público, en la profesionalización de nuestro equipo médico y de enfermería, que nos permita acompañar de mejor manera a los niños con enfermedades catastróficas y a sus padres”, afirmó la Vicepresidenta.
En este sentido, para lograr cumplir este propósito, la vicepresidenta María Alejandra Muñoz informó que se está trabajando articuladamente con el Ministerio de Salud Pública y organismos internacionales para, a través de un plan a corto plazo, suscribir convenios que fortalezcan la atención a niñas y niños diagnosticados con
enfermedades degenerativas.
“La construcción de la ética en un país significa preocuparse por el que no puede acceder, por el que menos tiene, por resolver los problemas reales”, dijo. Las autoridades visitaron distintas áreas de esta casa de salud y acordaron rediseñar espacios para que los pacientes que padecen de enfermedades que requieren atención prioritaria, tengan líneas exclusivas de asistencia médica con mayor velocidad.
“Hablar de ética implica poner en el centro de la discusión el cierre de brechas, visibilizar al que menos tiene, a quienes carecen de lo básico y hacer que su carga sea más ligera. La desaceleración de los daños del covid-19 es una urgencia”, puntualizó la vicepresidenta María Alejandra Muñoz.
Sanar, comer y producir, tres ejes de una gestión de 42 semanas de la Vicepresidencia de la República que se enfoca en la atención prioritaria a la desnutrición infantil y el desarrollo de capacidades plenas de los más pequeños. (I)