La Unidad Educativa Fiscomisional Juan XXIII es reconocida por ser uno de los planteles más prestigiosos de la provincia de Esmeraldas.

En 2018 cumple 50 años de vida institucional y festeja sus bodas de oro. Desde su fundación recorrió un camino de obstáculos y triunfos dignos de conmemorar, gracias a los empeños de la comunidad educativa.

La institución abrió sus puertas, como un colegio de ciclo básico, el 2 de mayo de 1968, con 27 alumnos que conformaron la primera promoción de estudiantes. Fue bautizada inicialmente con el nombre La Dolorosa y se centró desde el comienzo en el credo que llevaría por largo tiempo: el catolicismo. El 17 de junio de 1968, el Ministerio de Educación autorizó su funcionamiento y lo declaró plantel fiscomisional.

A partir de 28 de noviembre de 2011, la Dirección Provincial de Educación legalizó el servicio académico de la Unidad Educativa Fiscomisional Juan XXIII conformada por la escuela Sagrado Corazón y colegio Juan XXIII, desde el primer año de educación básica hasta el tercero de bachillerato, a partir del año lectivo 2012-2013.

En 2014 se convirtió en el primer establecimiento educativo del cantón Quinindé con Bachillerato Internacional, que permitió el mejoramiento cualitativo de la enseñanza en beneficio de sus estudiantes. En la actualidad el bachillerato cuenta con las siguientes figuras profesionales: Contabilidad, Ciencias, Sistemas, Informática, Electromecánica, Mecanizado y Bachillerato Internacional.

El recorrido que ha tenido la familia juanina en el tiempo demuestra que lo pequeño en sus inicios puede convertirse en grande en el futuro, gracias a la aplicación del lema: “Dios, ciencia y trabajo”. (I)